20.11.08

Radio Tip #33 (Consejos al abrir el micrófono)

Algo que definitivamente ayudará a afinar la manera en que entregas tus intervenciones al aire, es comenzar pero de ¡ya!, a aplicar los siguientes consejos:

1. HABLA SIEMPRE CON UNA SONRISA

Si mantienes la sonrisa desde que enciendes el micrófono hasta que lo apagas, la transmitirás inevitablemente.

Es importante que tu público sienta ese positivismo, ese entusiasmo, esa alegría. Uno quizá pueda no estar de humor o quizá tu jefe te acaba de llamar la atención y la primera actividad que te toca hacer es abrir el micrófono y hablar. Se comprende tu situación, se te entiende, pero el público no tiene la culpa, es más, el público ni sabe que está pasando del otro lado del micrófono y lógicamente, no entendería qué es lo que pasa.

Sonríe; siempre sonríe al hablar.

2. DIRÍGETE A TU AUDITORIO EN SINGULAR.

Quizá por costumbre o porque se te hace lógico que si te estás dirigiendo a un público en masa, te refieras a ellos como USTEDES. Y es cierto, si al abrir el micrófono sabemos que no solo hay una persona, sino muchas personas escuchando al mismo tiempo, lo lógico es referirnos a ellas en plural (“… les informo que …….”, “…. no se pierdan la oportunidad de …..”, “…. ya saben, el número telefónico es ….”).

Pues el asunto no trabaja así, ya que si bien nuestros radioescuchas ponen atención al mismo tiempo, NO LO HACEN TODOS EN EL MISMO LUGAR.

Ya pasaron décadas enteras, de la época en la que la familia entera se sentaba en la sala a escuchar el radio. Antes, todos juntos se sentaban y en silencio ponían atención a lo que salía por la bocina.

Hoy en día prácticamente nadie lo hace.

Cuando tú, yo, nuestra familia, compañeros y amigos, escuchamos radio, lo hacemos solos, lo hacemos individualmente. Entonces LO ADECUADO ES REFERIRTE A QUIEN TE ESCUCHA DE MANERA INDIVIDUAL.

Esto me lleva a pensar que debes ….

3. HABLAR AL RADIOESCUCHA COMO SI FUERA TU AMIGO

Imagina que tienes a tu mejor amigo frente a ti. Recuerda los momentos en que le platicas con entusiasmo y alegría tal o cual cosa, la forma en la que te diriges cuando pretendes hacerle una broma. ¿Qué palabras utilizas?, ¿De qué manera entregas tu mensaje? ¿Cómo le hablas?

Pues de la misma manera te debes dirigir al momento de abrir el micrófono.

Es importante que el radioescucha siente esa EMPATIA, que sienta que es un amigo quien le habla, que sienta esa confianza, esa naturalidad.

Otro aspecto que te ayudará mucho en la entrega de tus intervenciones al aire, es el que …

4. HABLES COMO SI QUIEN TE ESCUCHA, ESTUVIERA HASTA EL OTRO LADO DE UN SALON GRANDE.

Si tu estás hablando en un salón grande, 7 veces más grande que tu recamara, y a quien te diriges está hasta el otro extremo de ese salón, tienes que hablar con potencia, fuerte y precisamente. Bueno, pues EXACTAMENTE ASI ES COMO TIENES QUE HABLAR AL MICROFONO.

Todas las veces.

Definitivamente la firmeza de tu voz, la fuerza y claridad con la que lo hagas, será bien recibida por el auditorio.

5. NO HAGAS PREGUNTAS INNECESARIAS

La siguiente costumbre que hay que cambiar, es cuando hacemos preguntas innecesarias y sin sentido.

“¡Hola!, … ¿qué tal?”, suelo escuchar en Los Angeles a locutores de radio y presentadores de televisión cuando comienzan sus programas o turnos.

¿Qué tal? …. ¿y quién responde?, ... ¿quién escucha esta respuesta?

Si recuerdas la regla de no hablar más que siete segundos en tus intervenciones (ver los primeros “Tips de Radio”), cada palabra, cada segundo, cuenta enormidades.

Aunque suene simple y sencillo, un “¿Qué tal?” se lleva tiempo y es mucho mejor que la suplas con algo más de valor.

Utiliza tu ingenio; desarrolla tu originalidad. Tienes una oportunidad invaluable de CREAR, de INVENTAR. Esto es la magia de la radio y tienes que aprovecharla.

Pero no nada más se trata de ser creativo y original; tus palabras tienen que ser útiles, de valor para tu auditorio.

Procura entonces no hacer preguntas al aire. La única ocasión en que lo debes hacer, es obviamente cuando se trata de un concurso.

Fuera de ahí, debes erradicar en la medida de lo posible, cuestionamientos inútiles que ni pueden ser respondidos, ni nos llevan a nada provechoso.

6. NO SALUDES A UNA CIUDAD

Otra costumbre a eliminar, es el abrir el micrófono y saludar … ¡a una ciudad!
“¡Hola México!, … ¿Cómo estás?” … “Buenos Aires querido, ¿Qué dices?” (aquí ejemplifico dos casos con doble error y eso que apenas inician el turno de quienes lo dicen).

Despierta Madrid, es hora de levantarse”.

La Ciudad de México, Buenos, Aires, Madrid o el lugar en donde transmitas actualmente, NO TE ESCUCHA. Una ciudad, un poblado, a no ser por sus habitantes, no escuchan la radio.

Monumentos, calles, edificios, árboles, postes, semáforos, no sintonizan una estación. Entonces, ¿por qué dirigirse así?

PERSONALIZA, has que el radioescucha sienta que le estás hablando a él, no a una ciudad o poblado.

7. NO LEAS LA NOTICIA

Un pésimo hábito y una horrible y mala costumbre que escucho a menudo de infinidad de locutores, es leer la noticia o artículo.

Es tan grave, que se nota que están haciendo un esfuerzo tremendo por no tropezarse al leer, que en la intención de hacer llegar el mensaje.

Y se vuelve caótico cuando el locutor, no tiene la habilidad de hablar leyendo.

Y es insoportable cuando lo hace por laaaaaaaaargos segundos (una vez oí a una locutora en Tijuana, leer un poco más de 2 minutos un artículo sobre salud. La estación transmite música pop en Español).

Y el colmo y lo criminal en la radiodifusión, es cuando el locutor lee lo que a EL LE PARECE INTERESANTE y no lo que le es útil al auditorio, es decir, interrumpe el entretenimiento musical o informativo, para leer una serie de tonterías que nada mas a él le interesan.

¿Estoy o no estoy en lo correcto?, … ¿has escuchado alguna vez algo así? (no me respondas que conoces alguien que DIARIAMENTE LO HACE, porque la estación que albergue a ese locutor sin corregirlo, TIENE UN GRAVISIMO PROBLEMA DE ENTRETENIMIENTO AL AIRE).

Cuando algo capte tu atención, te parezca interesante Y ESTES SEGURO DE QUE TAMBIEN VA A SER INTERESANTE A TU AUDITORIO, léelo detenidamente, pon la hoja boca abajo y di al aire LO QUE RECUERDES HABER LEIDO.

Esto logrará que lo digas a tu estilo, con tus propias palabras y que lo hagas brevemente y hasta con puntos de vista muy tuyos. El paquete que entregues en esa ocasión, será bien recibido.

Quizá si se trata de fechas, nombres o cifras, se te permita voltear la hoja para verificarlas (no forces tu memoria en estos casos), pero nada mas para eso. Lee la noticia o el artículo y de lo que te acuerdes, es de lo que vas a decir al aire.

Punto.

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