29.1.10

Deja el micrófono abierto y ahora esta en problemas

De todos es sabido que hay que tener cuidado con dejar el micrófono abierto.

Una vez al aire nuestras palabras, no hay manera de borrarlas. Por eso vuelvo a recomendar que la locución no es ningún juego y que para salir al aire, hay que estar siempre preparados con lo que vamos a decir.

El pasado martes 26 de Enero, lamentablemente un diputado Mexicano, que a su vez es locutor de una estación llamada “EXA” (no sé que hace como locutor de radio en un horario en el cual debería de estar trabajando como diputado), supuestamente bromeo sobre la forma en la cual los Haitianos están recibiendo ayuda, ya que se sintió ofendido que la Cámara de Diputados en la Ciudad de México, haya autorizado descontar un día del salario de estos servidores públicos, para donarlo como ayuda para el pueblo Haitiano.

Ariel Gómez León, diputado federal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el cual es apodado "El Chunko", mostro su racismo al considerar que los damnificados Haitianos son "negros abusivos" que deberían ser marcados con tinta blanca para evitar que recojan más ayuda de la que merecen.

"Como todos son negros y se parecen tanto, había que marcarlos con una tinta indeleble para que no se les repita la ayuda. La tinta tiene que ser blanca porque la que usa el Instituto Federal Electoral no se les notaría por ser tan negros", dijo al aire, no sin antes enfatizar que los rostros de los Haitianos no denotan necesidad sino "abusivez" (creo que quiso decir abusividad).

Cuando se le reclamo este improperio, esta persona alego que estaba muy apenada con lo que sucedió y que “a veces se dejan los micrófonos abiertos”. “En esta ocasión y al irnos al corte nos quedamos platicando, pero no se apagó el micrófono y salió al aire esta broma, pero los Mexicanos siempre nos reímos y hacemos bromas de la vida y estábamos haciendo una broma y lamentablemente salió al aire”.

Bueno, en primer lugar NO TODOS LOS MEXICANOS nos reímos de las desgracias como ésta de Haití.

En segundo lugar, si es un servidor público, esta para SERVIR al pueblo, no para juzgarlo y/o hacer bromas. Cierto que los Haitianos no son un grupo al cual él tenga que servir, pero en una desgracia de esta magnitud, sencillamente no debería de haber fronteras.

Tercero, estar al aire es una misión que requiere de mucha responsabilidad y la misión principal es SERVIR A LA COMUNIDAD. Un locutor es un ejemplo, un guía, un armonizador de las necesidades comunitarias y su función en este caso, es satisfacer las necesidades de su auditorio en San Cristóbal de las Casas, ciudad en donde este individuo sale al aire en el Estado de Chiapas.

Realizar comentarios sobre la pena que le causa el donar forzosamente un día de sueldo para una causa noble y bromear sobre la desgracia Haitiana, no satisface de ninguna manera las necesidades de su auditorio. Cierto es que él alega que lo sucedido fue un accidente, pero el incidente refleja sin duda alguna, lo que hay en la mente de Ariel Gómez León.

Entonces, vuelvo a preguntar, ¿Qué hace un individuo como este tras un micrófono?

Lo mínimo que se debe de hacer es impedirle volver a hablar en una cabina de radio y quizá sea benéfico también enviarlo a Haití para que sienta en carne viva, lo que en verdad está sufriendo esa población. Es la única manera que encuentro, en la que en verdad obtenga un arrepentimiento sincero a lo que dijo el martes pasado.