Aquí en los Estados Unidos (como quizá en muchas otras partes del mundo), las compañías le piden a quienes atienden a sus clientes, que les den un "toquecillo especial" al trato que se les va a dar cuando por ejemplo, les llaman por teléfono.
Parte de su entrenamiento incluye el ‘‘mostrarse interesados’’ por saber cómo les va a esos clientes y no es extraño el escuchar un, “¿Cómo le va hoy en día?”.
Número uno: Como me vaya no es asunto suyo.
Número dos: Porque a usted no le importa. ¿O si?
Seamos sinceros, el empleado lo pregunta porque algún "genio consultor" ha convencido a dicha empresa a que se realice este tipo de preguntas,
PRETENDIENDO QUE LES IMPORTA EL BIENESTAR DE SUS CLIENTES.
Hablando por la mayoría de nosotros, pienso que lo único que queremos es que nos resuelvan, es el motivo o motivos por los cuales llamamos y no vernos forzados a entrar en una platica ridícula y sin sentido, que únicamente consume nuestro tiempo.
Si “el tiempo es oro”, entonces esta práctica daña a mi oro porque si lo pierdo en tonterías como esta, lógicamente no me esta yendo bien en mi día y no nos queda otro recurso que responder a esa pregunta sin sinceridad con un, “bien, bien …”.
¿Y qué tiene que ver esto con la radiodifusión?, te podrás preguntar.
Pues que este caso es muy parecido a algunas estaciones que se toman 45 segundos en decirle a su auditorio que ellos pasan menos tiempo hablando y pasan tocando más música.
O peor aún, es algo parecido a bastantes locutores (si no es que la mayoría), que mencionan al aire, “Queremos saber lo que opinas” Y NUNCA RESPONDEN EL TELÉFONO O CONTESTAN LOS CORREOS ELECTRÓNICOS.
Procura tener respeto por el tiempo de tu auditorio. Con decir, “Voy a limpiar las líneas en éste momento y voy a contestar sólo dos llamadas, así que suerte y espero que una de ellas, sea la tuya”.
La gente no es tonta. Sabe muy bien que las posibilidades son escasas, pero aún así se aventuran a llamar, “porque saben que quizá una de esas llamadas puede ser la suya”. Pero si no entra, por lo menos no se sintieron defraudados porque se les advirtió.
Entonces, por el bien de la radiodifusión, quiero que por favor esto se te quede bien grabado,
“Tu no pruebas que te importa y te interesa el bien de tu auditorio con decírselo; lo pruebas demostrándoselo”.
18.2.09
Radio Tip # 50 (Los 'Groupies' de la Radio)
Una de las malas interpretaciones que se tiene del mundo de la radio, es que es un medio divertido donde de seguro es muy “padre” o muy “chévere” trabajar.
Y en parte lo es. ¿Qué sentido tendría el trabajar en un sitio donde no disfrutamos nuestro trabajo?
Pero lamentablemente hay personas que tienen totalmente equivocado el concepto de qué es realmente la radiodifusión.
Lo que voy a escribir seguramente va a llegarle muy duro a mucha gente, pero eso a mi no me importa, ya que como verdadero apasionado de la radiodifusión, debo primero que nada respetarla y segundo, hacerla respetar.
Y lo digo porque tristemente he notado que existen elementos que quieren trabajar en la radio PORQUE LA QUIEREN UTILIZAR. Son los llamados “groupies”, gente que su único deseo es estar codeándose con los artistas o pertenecer a la elite de la industria del entretenimiento y para ello, buscan enrolarse dentro de las filas de la radiodifusión.
Como profesionales de un medio así, debemos sentirnos obligados a evitar en la medida de lo posible, que este tipo de personas penetren a nuestras cabinas de radio.
A mi me ha tocado lidiar con todo tipo de gentes, pero francamente el tener que enfrentarme con los "groupies", es una tarea muy difícil y engorrosa, porque me entristece ver que no entienden que la radiodifusión es un negocio primero que nada; después, es un trabajo muy serio, porque tocamos cuerdas sentimentales de quienes nos escuchan y lo hacemos de manera muy específica.
No alcanzan a entender que debemos ser extremadamente cautelosos con lo que decimos o hacemos, porque podemos causar lesiones muy serias con un simple descuido (recomiendo rentar la película que en Inglés se llama “The Fisher King”, con Robin Williams y Jeff Bridges, para que entiendas lo que te digo) y finalmente, … ¡si!, es un trabajo divertido, donde A VECES nos podemos divertir y beneficiar de las ventajas de trabajar en radio, pero precisamente aquí es donde me estaciono para hablarte de ello.
Estas personas están convencidas de que la radio es un juego, que pueden venir, fanfarronear, jugar, entretenerse y divertirse a placer. Como lo he comentado antes, el concepto que tienen de la radio sería el adecuado si fuesen radioescuchas, pero como locutores, o peor aún, como pseudos ejecutivos de una estación, sencillamente no entienden, ni entenderán, que hacer radio es otro mundo.
Y precisamente lo que dió pie al veto que actualmente sufro en la radio en Español dentro de los Estados Unidos, comenzó cuando una amiga de la niñez de un Programador de una estación para la que yo trabajaba, fue colocada ante tanta insistencia por parte de ella, justo en la recepción.
Desde ahí pude percibir que sus intenciones eran nefastas para la estación y la radio en general.
Con el tiempo, yo fui promovido a un puesto en una estación hermana y el programador, al yo dejar mi puesto vacante, ascendió a esta mujer de la recepción, ... a ocupar mi puesto.
Como lo leíste, ... de recepcionista, fue ascendida a ocupar el puesto de Asistente de Programación en una estación de radio en plena ciudad de Los Angeles.
Injusto para un buen número de aspirantes y verdaderos profesionales de la radiodifusión, que merecido se tienen un puesto de esta naturaleza.
Y resultó que tras una serie de quejas de parte mia, por la mala distribución de boletos que ella hizo para un evento anual masivo de la emisora, quise imponerme para intentar que ella realizara su trabajo correctamente.
A ella mi proceder no le pareció, se ofendió y fue a acusarme de prepotente, abusivo, violento y varias cosas más. La Dirección General me extendió una advertencia por escrito, provocando así el tambaleó de la plataforma que me sostenía sólidamente en la radio acá en Los Angeles.
Pasados unos años y yo definitivamente vetado de las estaciones en Español en los Estados Unidos, simplemente por defender los principios de la radiodifusión, la vida no me hizo justicia a mi, sino que a la radiodifusión, ya que esta mujer fue despedida por el dueño de su misma estación, porque ella acostumbraba a embriagarse en los clubes nocturnos que se anunciaban en la emisora y exigía beneficios y tratos preferenciales, … “porque yo trabajo en la radio”, decía.
Irónicamente, su último sainete lo cometió con un cliente muy importante, un Club que apenas comenzaba a anunciarse en la estación y el cual puso una queja muy seria ante la emisora. Y digo irónicamente porque fue acusada de prepotente, abusiva, violenta y … borracha. Las mismas quejas que ella tuvo de mi, a excepción del alcohol.
Es el típico caso de que creen que trabajar en una estación de radio, es sinónimo de diversión, destrampe, relajo y tratos preferenciales.
No tienen ni idea que de en este medio A VECES uno puede aprovecharse de estos beneficios, pero no SIEMPRE ni OBLIGATORIAMENTE.
A VECES nada mas.
Y me resultaría imposible enumerar la cantidad de “groupies” que me ha tocado encontrar en mi carrera dentro de la radio, pero quiero contarte al menos otro notable caso que fue el de un locutor que tuvo un día un altercado con un taxista.
Este locutor llamó a luna empresa que administra el servicio de taxis, para quejarse amargamente de un incidente con el taxista y le recalcó a la persona que le contestó el teléfono, que “él tenía el poder de hablar por un micrófono” para hacer pública su queja.
Este locutor grabó toda la conversación que tuvo con la representante de la compañía de taxis y la transmitió al aire en la primera oportunidad que tuvo dentro de su turno.
¿Prepotencia?, … ¿arrogancia?, … ¿falta de profesionalismo?, … tu nombra y atinarás.
Aunque este es uno de esos casos extraños en la radio donde difundir una grabación así, SI RESULTA ENTRETENIDO PARA EL AUDITORIO (algo que quizá pienses que yo mismo me contradigo, pero no, no es así, en verdad es entretenido escuchar un caso asi), mi objeción es con la actitud y el concepto que este joven locutor tiene de tener un empleo en la radio.
Decir que tiene “el poder", es sencillamente inaceptable y reprobable.
Ve que diferente suena si el pensara que, “tengo la responsabilidad de … ”.
Repito, la radio no es un juguete; es un negocio serio, muy delicado. No debemos permitir que se use como escalón o peldaño para satisfacer los caprichos o la egolatría de individuos que únicamente buscan su beneficio y su bienestar.
Son los típicos locutores que se sienten superiores “porque están en la radio”. Se sienten en un pedestal porque según ellos “son más que los radioescuchas”, … y los humillan, menosprecian y los maltratan.
Creen que impostando su voz lo hace únicos e indestructibles, a pesar de que dicen puras vanalidades y tonterías.
Son gente incapaz de tener un tiempo para sus seguidores cuando los encuentran por la calle; son los típicos que apenas se enteran que viene un artista o evento y preguntan si hay boletos para ellos; son los clásicos que van y fanfarronean con promotores y clientes de que “yo te voy a hacer promoción y a recomendar cuando esté al aire”, sin pensar el perjuicio que le hace a la emisora, a los radioescuchas y al Departamento de Ventas de la estación.
¡Ah!, … y son los típicos que no obstante que obtuvieron boletos para un evento, todavía exigen de primera fila y con pases "back stage". ¡Claro!, son los inevitables estorbos que nada tienen que hacer detrás del escenario, ni en los camerinos y que obstaculizan las operaciones del staff, coristas, músicos, productores y los propios artistas.
Yo estoy harto de que son personas que ruegan y se hincan porque se les permita estar al aire y cuando por fin logran un turno al aire, en la primera oportunidad de irse a un concierto o a algo similar que les convenga, andan buscando substituto que los cubra para esa fecha.
Si eres de los que continuamente lees estos “RadioTips” y eres como yo, un verdadero apasionado de la radiodifusión, que tomas tus funciones como una verdadera carrera, que afrentas con seriedad y profesionalismo tu misión y que en general, amas y respetas la radiodifusión, te suplico que en la medida de lo posible y si está en tus manos, evites que este tipo de personas ingresen a nuestro núcleo.
La radio no las necesita, el auditorio menos y si son tan nefastas para todos, ¿para qué abrirles la puerta?
Me ha tocado entrevistar a muchachas vestidas extremadamente provocativas, insinuantes, la típica “dispuesta a todo” con tal de obtener un empleo en la radio, pero lejos de provocar mi interés, logran que cierre todavía más las puertas.
No creo que nadie más pueda evitar que esto suceda, por lo que si no lo hacemos nosotros, nos veremos invadidos una y otra vez por este tipo de elementos.
Son fáciles, de detectar; son fáciles de reconocer y usualmente, no duran en las estaciones.
Pero a partir de ahorita, estoy seguro de que ya sabes por qué.
Y en parte lo es. ¿Qué sentido tendría el trabajar en un sitio donde no disfrutamos nuestro trabajo?
Pero lamentablemente hay personas que tienen totalmente equivocado el concepto de qué es realmente la radiodifusión.
Lo que voy a escribir seguramente va a llegarle muy duro a mucha gente, pero eso a mi no me importa, ya que como verdadero apasionado de la radiodifusión, debo primero que nada respetarla y segundo, hacerla respetar.
Y lo digo porque tristemente he notado que existen elementos que quieren trabajar en la radio PORQUE LA QUIEREN UTILIZAR. Son los llamados “groupies”, gente que su único deseo es estar codeándose con los artistas o pertenecer a la elite de la industria del entretenimiento y para ello, buscan enrolarse dentro de las filas de la radiodifusión.
Como profesionales de un medio así, debemos sentirnos obligados a evitar en la medida de lo posible, que este tipo de personas penetren a nuestras cabinas de radio.
A mi me ha tocado lidiar con todo tipo de gentes, pero francamente el tener que enfrentarme con los "groupies", es una tarea muy difícil y engorrosa, porque me entristece ver que no entienden que la radiodifusión es un negocio primero que nada; después, es un trabajo muy serio, porque tocamos cuerdas sentimentales de quienes nos escuchan y lo hacemos de manera muy específica.
No alcanzan a entender que debemos ser extremadamente cautelosos con lo que decimos o hacemos, porque podemos causar lesiones muy serias con un simple descuido (recomiendo rentar la película que en Inglés se llama “The Fisher King”, con Robin Williams y Jeff Bridges, para que entiendas lo que te digo) y finalmente, … ¡si!, es un trabajo divertido, donde A VECES nos podemos divertir y beneficiar de las ventajas de trabajar en radio, pero precisamente aquí es donde me estaciono para hablarte de ello.
Estas personas están convencidas de que la radio es un juego, que pueden venir, fanfarronear, jugar, entretenerse y divertirse a placer. Como lo he comentado antes, el concepto que tienen de la radio sería el adecuado si fuesen radioescuchas, pero como locutores, o peor aún, como pseudos ejecutivos de una estación, sencillamente no entienden, ni entenderán, que hacer radio es otro mundo.
Y precisamente lo que dió pie al veto que actualmente sufro en la radio en Español dentro de los Estados Unidos, comenzó cuando una amiga de la niñez de un Programador de una estación para la que yo trabajaba, fue colocada ante tanta insistencia por parte de ella, justo en la recepción.
Desde ahí pude percibir que sus intenciones eran nefastas para la estación y la radio en general.
Con el tiempo, yo fui promovido a un puesto en una estación hermana y el programador, al yo dejar mi puesto vacante, ascendió a esta mujer de la recepción, ... a ocupar mi puesto.
Como lo leíste, ... de recepcionista, fue ascendida a ocupar el puesto de Asistente de Programación en una estación de radio en plena ciudad de Los Angeles.
Injusto para un buen número de aspirantes y verdaderos profesionales de la radiodifusión, que merecido se tienen un puesto de esta naturaleza.
Y resultó que tras una serie de quejas de parte mia, por la mala distribución de boletos que ella hizo para un evento anual masivo de la emisora, quise imponerme para intentar que ella realizara su trabajo correctamente.
A ella mi proceder no le pareció, se ofendió y fue a acusarme de prepotente, abusivo, violento y varias cosas más. La Dirección General me extendió una advertencia por escrito, provocando así el tambaleó de la plataforma que me sostenía sólidamente en la radio acá en Los Angeles.
Pasados unos años y yo definitivamente vetado de las estaciones en Español en los Estados Unidos, simplemente por defender los principios de la radiodifusión, la vida no me hizo justicia a mi, sino que a la radiodifusión, ya que esta mujer fue despedida por el dueño de su misma estación, porque ella acostumbraba a embriagarse en los clubes nocturnos que se anunciaban en la emisora y exigía beneficios y tratos preferenciales, … “porque yo trabajo en la radio”, decía.
Irónicamente, su último sainete lo cometió con un cliente muy importante, un Club que apenas comenzaba a anunciarse en la estación y el cual puso una queja muy seria ante la emisora. Y digo irónicamente porque fue acusada de prepotente, abusiva, violenta y … borracha. Las mismas quejas que ella tuvo de mi, a excepción del alcohol.
Es el típico caso de que creen que trabajar en una estación de radio, es sinónimo de diversión, destrampe, relajo y tratos preferenciales.
No tienen ni idea que de en este medio A VECES uno puede aprovecharse de estos beneficios, pero no SIEMPRE ni OBLIGATORIAMENTE.
A VECES nada mas.
Y me resultaría imposible enumerar la cantidad de “groupies” que me ha tocado encontrar en mi carrera dentro de la radio, pero quiero contarte al menos otro notable caso que fue el de un locutor que tuvo un día un altercado con un taxista.
Este locutor llamó a luna empresa que administra el servicio de taxis, para quejarse amargamente de un incidente con el taxista y le recalcó a la persona que le contestó el teléfono, que “él tenía el poder de hablar por un micrófono” para hacer pública su queja.
Este locutor grabó toda la conversación que tuvo con la representante de la compañía de taxis y la transmitió al aire en la primera oportunidad que tuvo dentro de su turno.
¿Prepotencia?, … ¿arrogancia?, … ¿falta de profesionalismo?, … tu nombra y atinarás.
Aunque este es uno de esos casos extraños en la radio donde difundir una grabación así, SI RESULTA ENTRETENIDO PARA EL AUDITORIO (algo que quizá pienses que yo mismo me contradigo, pero no, no es así, en verdad es entretenido escuchar un caso asi), mi objeción es con la actitud y el concepto que este joven locutor tiene de tener un empleo en la radio.
Decir que tiene “el poder", es sencillamente inaceptable y reprobable.
Ve que diferente suena si el pensara que, “tengo la responsabilidad de … ”.
Repito, la radio no es un juguete; es un negocio serio, muy delicado. No debemos permitir que se use como escalón o peldaño para satisfacer los caprichos o la egolatría de individuos que únicamente buscan su beneficio y su bienestar.
Son los típicos locutores que se sienten superiores “porque están en la radio”. Se sienten en un pedestal porque según ellos “son más que los radioescuchas”, … y los humillan, menosprecian y los maltratan.
Creen que impostando su voz lo hace únicos e indestructibles, a pesar de que dicen puras vanalidades y tonterías.
Son gente incapaz de tener un tiempo para sus seguidores cuando los encuentran por la calle; son los típicos que apenas se enteran que viene un artista o evento y preguntan si hay boletos para ellos; son los clásicos que van y fanfarronean con promotores y clientes de que “yo te voy a hacer promoción y a recomendar cuando esté al aire”, sin pensar el perjuicio que le hace a la emisora, a los radioescuchas y al Departamento de Ventas de la estación.
¡Ah!, … y son los típicos que no obstante que obtuvieron boletos para un evento, todavía exigen de primera fila y con pases "back stage". ¡Claro!, son los inevitables estorbos que nada tienen que hacer detrás del escenario, ni en los camerinos y que obstaculizan las operaciones del staff, coristas, músicos, productores y los propios artistas.
Yo estoy harto de que son personas que ruegan y se hincan porque se les permita estar al aire y cuando por fin logran un turno al aire, en la primera oportunidad de irse a un concierto o a algo similar que les convenga, andan buscando substituto que los cubra para esa fecha.
Si eres de los que continuamente lees estos “RadioTips” y eres como yo, un verdadero apasionado de la radiodifusión, que tomas tus funciones como una verdadera carrera, que afrentas con seriedad y profesionalismo tu misión y que en general, amas y respetas la radiodifusión, te suplico que en la medida de lo posible y si está en tus manos, evites que este tipo de personas ingresen a nuestro núcleo.
La radio no las necesita, el auditorio menos y si son tan nefastas para todos, ¿para qué abrirles la puerta?
Me ha tocado entrevistar a muchachas vestidas extremadamente provocativas, insinuantes, la típica “dispuesta a todo” con tal de obtener un empleo en la radio, pero lejos de provocar mi interés, logran que cierre todavía más las puertas.
No creo que nadie más pueda evitar que esto suceda, por lo que si no lo hacemos nosotros, nos veremos invadidos una y otra vez por este tipo de elementos.
Son fáciles, de detectar; son fáciles de reconocer y usualmente, no duran en las estaciones.
Pero a partir de ahorita, estoy seguro de que ya sabes por qué.
Radio Tip # 49 (El contexto debe ir antes de la información)
La gente de radio viene a Los Angeles y espera escuchar la mejor radio del mundo.
Obvio, trabajar, producir y vivir en la capital del entretenimiento del mundo, nos obliga a hacer la mejor radiodifusión del planeta, pero aunque de momento me reserve mis comentarios, quiero enfocarme a otro aspecto que quizá es poco conocido:
Los Angeles es también la capital del tráfico vehicular en el mundo.
Sin embargo, es triste escuchar a los reporteros de tráfico salir al aire sin ninguna preparación y sin ninguna supervisión (hablo de reporteros en Inglés y en Español).
Usualmente se les escucha describir el problema de tráfico y después dar la ubicación.
"El tráfico hacia el norte está estancado por varias millas debido a un apilamiento de 5 autos en el freeway 405, justo al sur del Boulevard Century…”.
Y el conductor que quizá va distraído con ‘equis’ pensamientos y que no va poniendo atención, pero que aunque tarde, alcanza a reaccionar, se dice (o le dice a uno de los pasajeros del vehículo), “… ¿qué?, … ¿el 405 en Century?, … ¿qué pasa ahí?”.
No importa si eres reportero de tráfico o eres locutor, en ambos casos, el principio es el mismo:
Asegúrate de que el contexto, venga antes de la información.
En este ejemplo, lo correcto sería decir:
"Si te vas acercando al freeway 405, justo al sur del Boulevard Century, ... encontrarás que el tráfico hacia el norte está estancado por varias millas debido a un apilamiento de 5 autos".
Contexto antes de la información.
Obvio, trabajar, producir y vivir en la capital del entretenimiento del mundo, nos obliga a hacer la mejor radiodifusión del planeta, pero aunque de momento me reserve mis comentarios, quiero enfocarme a otro aspecto que quizá es poco conocido:
Los Angeles es también la capital del tráfico vehicular en el mundo.
Sin embargo, es triste escuchar a los reporteros de tráfico salir al aire sin ninguna preparación y sin ninguna supervisión (hablo de reporteros en Inglés y en Español).
Usualmente se les escucha describir el problema de tráfico y después dar la ubicación.
"El tráfico hacia el norte está estancado por varias millas debido a un apilamiento de 5 autos en el freeway 405, justo al sur del Boulevard Century…”.
Y el conductor que quizá va distraído con ‘equis’ pensamientos y que no va poniendo atención, pero que aunque tarde, alcanza a reaccionar, se dice (o le dice a uno de los pasajeros del vehículo), “… ¿qué?, … ¿el 405 en Century?, … ¿qué pasa ahí?”.
No importa si eres reportero de tráfico o eres locutor, en ambos casos, el principio es el mismo:
Asegúrate de que el contexto, venga antes de la información.
En este ejemplo, lo correcto sería decir:
"Si te vas acercando al freeway 405, justo al sur del Boulevard Century, ... encontrarás que el tráfico hacia el norte está estancado por varias millas debido a un apilamiento de 5 autos".
Contexto antes de la información.
Radio Tip # 48 (Agregar emoción a tus llamadas al aire)
Una destreza que no es fácil de adquirir pero que una vez dominada, provocará que hagas milagros en radio, es el que puedas insertar emoción a una llamada telefónica de un radioescucha.
No esperes a que en tus siguientes llamadas telefónicas logres insertar este beneficio, pero si es bueno que te pongas a meditar y a pensar la mejor manera de hacerlo.
Te voy a presentar un ejemplo de qué exactamente quiero decir con agregar emoción a una llamada.
Supongamos que contestas el teléfono en cabina y quien llama es un empleado de una oficina que quiere que le ayudes a ver quien tiene la razón en el nombre de la persona que canta una canción.
La mayoría de los locutores cuando reciben una llamada, la toman con la idea de resolver el motivo y colgar lo más pronto posible. Y hacen bien, el tiempo apremia en radio.
Pero, ¿por qué no agregar EMOCIÓN a la llamada?
En primera porque no sabían que se puede (y se debe) agregar emoción y en segunda, porque aunque se sepa, no es fácil. Es un arte que debes comenzar a adquirir.
Pero continuando con el ejemplo, se recibe la llamada de un radioescucha que tiene una disputa con su jefe, por saber quién tiene la razón en el nombre de la persona que canta una canción.
En lugar de simplemente responder la pregunta y terminar con el asunto, se puede lograr una conversación entretenida.
Algo como esto:
LOCUTOR: "¿Tu quién dices que la canta?".
RADIOESCUCHA: "El Cantante 1".
LOCUTOR: "¿Y quién dice tu jefe que la canta?".
RADIOESCUCHA: "El Cantante 2".
LOCUTOR: "Dile a tu jefe que si tu le atinas, te de un día de descanso con derecho a pago".
RADIOESCUCHA: (gritando lejos del teléfono) "Dice que si yo gano, me da usted un día de descanso con derecho a pago".
LOCUTOR: "Y que si él gana, trabajarías un día extra gratis".
RADIOESCUCHA: (todavía gritándole a su jefe) " ... y que si estoy mal, … ¡tengo que trabajar un día extra sin goce de sueldo!".
LOCUTOR: "¿Dijo que si?".
RADIOESCUCHA: "Si, dice que si".
LOCUTOR: "¡Amigo, acabas de ganarte un día libre con derecho a sueldo!".
RADIOESCUCHA: (gritos de alegría por el triunfo)
La diferencia entre haber contestado la llamada dando solamente la respuesta y el convertir esta llamada en algo PERSONAL, fue el agregar esa capa EMOCIONAL.
Y si te fijas, en este ejemplo también estaríamos agregando SUSPENSO al asunto, que en radio nos ayuda todavía más.
Alfred Hitchcock dijo un día que no le gustaba trabajar con historias de encontrar quién es el culpable, porque “Son solamente rompecabezas inteligentes, ¿o no? … son tramas INTELECTUALES en lugar de ser EMOCIONALES y la emoción es la única cosa que mantiene a mi auditorio interesado”.
Y si preguntamos quién ha sido el mago del suspenso en el mundo del cine, todos los caminos nos llevarán hacia Alfred Hitchcock.
Práctica esto, pon verdadero interés por hacer mejor radio y (aquí voy de nuevo) … utiliza P-R-E-P-A-R-A-C-I-Ó-N para agregar emoción a tus llamadas, porque todo esto es la clave para que seas tu quien haga magia, con esas llamadas al aire.
No esperes a que en tus siguientes llamadas telefónicas logres insertar este beneficio, pero si es bueno que te pongas a meditar y a pensar la mejor manera de hacerlo.
Te voy a presentar un ejemplo de qué exactamente quiero decir con agregar emoción a una llamada.
Supongamos que contestas el teléfono en cabina y quien llama es un empleado de una oficina que quiere que le ayudes a ver quien tiene la razón en el nombre de la persona que canta una canción.
La mayoría de los locutores cuando reciben una llamada, la toman con la idea de resolver el motivo y colgar lo más pronto posible. Y hacen bien, el tiempo apremia en radio.
Pero, ¿por qué no agregar EMOCIÓN a la llamada?
En primera porque no sabían que se puede (y se debe) agregar emoción y en segunda, porque aunque se sepa, no es fácil. Es un arte que debes comenzar a adquirir.
Pero continuando con el ejemplo, se recibe la llamada de un radioescucha que tiene una disputa con su jefe, por saber quién tiene la razón en el nombre de la persona que canta una canción.
En lugar de simplemente responder la pregunta y terminar con el asunto, se puede lograr una conversación entretenida.
Algo como esto:
LOCUTOR: "¿Tu quién dices que la canta?".
RADIOESCUCHA: "El Cantante 1".
LOCUTOR: "¿Y quién dice tu jefe que la canta?".
RADIOESCUCHA: "El Cantante 2".
LOCUTOR: "Dile a tu jefe que si tu le atinas, te de un día de descanso con derecho a pago".
RADIOESCUCHA: (gritando lejos del teléfono) "Dice que si yo gano, me da usted un día de descanso con derecho a pago".
LOCUTOR: "Y que si él gana, trabajarías un día extra gratis".
RADIOESCUCHA: (todavía gritándole a su jefe) " ... y que si estoy mal, … ¡tengo que trabajar un día extra sin goce de sueldo!".
LOCUTOR: "¿Dijo que si?".
RADIOESCUCHA: "Si, dice que si".
LOCUTOR: "¡Amigo, acabas de ganarte un día libre con derecho a sueldo!".
RADIOESCUCHA: (gritos de alegría por el triunfo)
La diferencia entre haber contestado la llamada dando solamente la respuesta y el convertir esta llamada en algo PERSONAL, fue el agregar esa capa EMOCIONAL.
Y si te fijas, en este ejemplo también estaríamos agregando SUSPENSO al asunto, que en radio nos ayuda todavía más.
Alfred Hitchcock dijo un día que no le gustaba trabajar con historias de encontrar quién es el culpable, porque “Son solamente rompecabezas inteligentes, ¿o no? … son tramas INTELECTUALES en lugar de ser EMOCIONALES y la emoción es la única cosa que mantiene a mi auditorio interesado”.
Y si preguntamos quién ha sido el mago del suspenso en el mundo del cine, todos los caminos nos llevarán hacia Alfred Hitchcock.
Práctica esto, pon verdadero interés por hacer mejor radio y (aquí voy de nuevo) … utiliza P-R-E-P-A-R-A-C-I-Ó-N para agregar emoción a tus llamadas, porque todo esto es la clave para que seas tu quien haga magia, con esas llamadas al aire.
Radio Tip # 47 (3 consejos más para ti que eres locutor)
No cantes sobre las canciones
Una práctica terrible y desastrosa, es cuando nos queremos hacer los graciosos, creemos que el auditorio lo va a ver como algo chistoso y que quizá, hasta va a apreciar.
¡Que equivocados y lejos de la realidad estamos!
Ponernos a cantar sobre las canciones cuando la melodía está ya por terminar o en cualquier parte del desarrollo de esta, es un hábito que debemos eliminar INMEDIATAMENTE, … desde ahorita mismo, porque sencillamente esto es inaceptable.
¿Qué te parecería que si eres uno de esos fans de la saga “La Guerra de las Galaxias” (“Star Wars” en Inglés), y al estar presenciando la última película de la saga, “The Clone Wars”, vieses a dos personas paradas frente a la primera fila y disfrazadas de Anakin Skywalker y el otro de Obi-Wan Kenobi, simulando actuar de manera simultanea con la escena que esos momentos se proyecta en la pantalla?
¿Distrayente?, … ¿incómodo?, … ¿molesto?, … sencillamente fuera de lugar?, … pues así nos escuchamos cuando cantamos sobre una canción.
No es gracioso y el auditorio no lo va a apreciar como algo gracioso ni de buen humor y uno como locutor, sencillamente se esta viendo y escuchando mal. Muy mal.
Nos parezca o no, una melodía es una obra donde hay muchísima gente involucrada en su creación y hay infinidad de horas para dejarla tal y como la escuchamos al aire.
Tengamos por lo tanto respeto por la creatividad, ejecución y producción de todos estos trabajos.
Siempre da las siglas al tope de la hora
Una de las armas poderosas de la mercadotecnia y la publicidad, es la repetición.
Cuando uno repite el nombre o cualquier elemento a publicitar, ayuda a COLOCAR, A POSICIONAR UN PRODUCTO y esto evidentemente es un elemento increíblemente valioso para la retención de la marca en el radioescucha.
Pues bien, en este caso nuestro producto y la marca es nuestra propia estación de radio y es importante que menciones las siglas por lo menos una vez cada hora.
Normalmente se hace al tope de cada hora para empujar fuertemente la marca o el producto y por comodidad y para asegurar que esta mención se haga por lo menos una vez cada hora, prácticamente todas las estaciones la transmiten grabada en el famoso cartucho llamado “Identificación” o “ID”.
Pero, ¿por qué al tope de la hora?
Porque para cumplir con los requisitos Federales de cada gobierno, se ha acordado que las estaciones de radio se IDENTIFIQUEN, pero para facilitar a las autoridades Federales la verificación de que una estación de radio está cumpliendo con su compromiso de identificarse, no va a ponerse a escuchar la programación durante toda una hora para ver en dónde se van a decir las siglas. Como saben que está acordado hacerlo en el tope de cada hora, simplemente al 5 para la hora, sintonizan la estación y esperan a que salga la mención.
Pero como también es humano errar (aunque a veces es la irresponsabilidad del operador o el locutor), los Directores de las estaciones no se aventuran a encargarle al locutor u operador que haga la mención de las siglas. Por eso y para evitarse multas y/o suspensiones, mejor la dejan ya grabada y programada.
¿Pero por qué te recomiendo que AL MENOS se haga una vez en la hora?, pues porque la gente encargada de realizar las encuestas para ratings, UTILIZAN SIGLAS EN SUS PROCEDIMIENTOS DE ENCUESTA y aunque te suene inaudito, los radioescuchas que ese mismo día y hasta por costumbre, diariamente sintonizan por decir “Radio Amor”, cuando le preguntan cuál es su estación es su favorita, responden o marcan la casilla de “Radio Exitos”.
Es demasiado extenso para explicar la forma en la que opera esto, pero si tienes la costumbre de que digas una o dos veces cada hora algo como:
“ … en la estación donde la música nunca termina, … ¡KREX 98.3, … Radio Exitos!”, ayudarías enormemente a posicionar la emisrora en las mentes de sus radioescuchas.
Habla como si le estuvieras hablando a un niño
Una manera simple y eficaz de que tu auditorio asimile y entienda todo lo que les quieres transmitir, es hablándoles como cuando le hablas a un niño.
Utilizando un lenguaje sencillo, generalizado, fácil de asimilar, pero lo más importante, fácil de entender, logras que efectivamente tu mensaje sea escuchado.
Y por favor, hazlo lo más breve posible.
Una práctica terrible y desastrosa, es cuando nos queremos hacer los graciosos, creemos que el auditorio lo va a ver como algo chistoso y que quizá, hasta va a apreciar.
¡Que equivocados y lejos de la realidad estamos!
Ponernos a cantar sobre las canciones cuando la melodía está ya por terminar o en cualquier parte del desarrollo de esta, es un hábito que debemos eliminar INMEDIATAMENTE, … desde ahorita mismo, porque sencillamente esto es inaceptable.
¿Qué te parecería que si eres uno de esos fans de la saga “La Guerra de las Galaxias” (“Star Wars” en Inglés), y al estar presenciando la última película de la saga, “The Clone Wars”, vieses a dos personas paradas frente a la primera fila y disfrazadas de Anakin Skywalker y el otro de Obi-Wan Kenobi, simulando actuar de manera simultanea con la escena que esos momentos se proyecta en la pantalla?
¿Distrayente?, … ¿incómodo?, … ¿molesto?, … sencillamente fuera de lugar?, … pues así nos escuchamos cuando cantamos sobre una canción.
No es gracioso y el auditorio no lo va a apreciar como algo gracioso ni de buen humor y uno como locutor, sencillamente se esta viendo y escuchando mal. Muy mal.
Nos parezca o no, una melodía es una obra donde hay muchísima gente involucrada en su creación y hay infinidad de horas para dejarla tal y como la escuchamos al aire.
Tengamos por lo tanto respeto por la creatividad, ejecución y producción de todos estos trabajos.
Siempre da las siglas al tope de la hora
Una de las armas poderosas de la mercadotecnia y la publicidad, es la repetición.
Cuando uno repite el nombre o cualquier elemento a publicitar, ayuda a COLOCAR, A POSICIONAR UN PRODUCTO y esto evidentemente es un elemento increíblemente valioso para la retención de la marca en el radioescucha.
Pues bien, en este caso nuestro producto y la marca es nuestra propia estación de radio y es importante que menciones las siglas por lo menos una vez cada hora.
Normalmente se hace al tope de cada hora para empujar fuertemente la marca o el producto y por comodidad y para asegurar que esta mención se haga por lo menos una vez cada hora, prácticamente todas las estaciones la transmiten grabada en el famoso cartucho llamado “Identificación” o “ID”.
Pero, ¿por qué al tope de la hora?
Porque para cumplir con los requisitos Federales de cada gobierno, se ha acordado que las estaciones de radio se IDENTIFIQUEN, pero para facilitar a las autoridades Federales la verificación de que una estación de radio está cumpliendo con su compromiso de identificarse, no va a ponerse a escuchar la programación durante toda una hora para ver en dónde se van a decir las siglas. Como saben que está acordado hacerlo en el tope de cada hora, simplemente al 5 para la hora, sintonizan la estación y esperan a que salga la mención.
Pero como también es humano errar (aunque a veces es la irresponsabilidad del operador o el locutor), los Directores de las estaciones no se aventuran a encargarle al locutor u operador que haga la mención de las siglas. Por eso y para evitarse multas y/o suspensiones, mejor la dejan ya grabada y programada.
¿Pero por qué te recomiendo que AL MENOS se haga una vez en la hora?, pues porque la gente encargada de realizar las encuestas para ratings, UTILIZAN SIGLAS EN SUS PROCEDIMIENTOS DE ENCUESTA y aunque te suene inaudito, los radioescuchas que ese mismo día y hasta por costumbre, diariamente sintonizan por decir “Radio Amor”, cuando le preguntan cuál es su estación es su favorita, responden o marcan la casilla de “Radio Exitos”.
Es demasiado extenso para explicar la forma en la que opera esto, pero si tienes la costumbre de que digas una o dos veces cada hora algo como:
“ … en la estación donde la música nunca termina, … ¡KREX 98.3, … Radio Exitos!”, ayudarías enormemente a posicionar la emisrora en las mentes de sus radioescuchas.
Habla como si le estuvieras hablando a un niño
Una manera simple y eficaz de que tu auditorio asimile y entienda todo lo que les quieres transmitir, es hablándoles como cuando le hablas a un niño.
Utilizando un lenguaje sencillo, generalizado, fácil de asimilar, pero lo más importante, fácil de entender, logras que efectivamente tu mensaje sea escuchado.
Y por favor, hazlo lo más breve posible.
Radio Tip # 46 (Usando audio de noticiero de TV al transmitir emergencias)
Amanecía el 11 de Septiembre del 2001 acá en Los Angeles, cuando recibo una llamada de mi Mamá totalmente alarmada desde la Ciudad de México, para decirme que encendiera la televisión de inmediato porque había gente lanzándose desde una de las torres del “World Trade Center”, ya que se estaba incendiando.
“Parece que un avión se estrelló en Nueva York contra el edificio”, me dijo.
Al enterarme de esta tragedia mundial, donde pude observar la manera en la que las dos torres del World Trade Center se derrumbaban, no había otra cosa que hacer:
“Tengo que irme de inmediato a la estación”, pensé.
Al llegar ahí, los directores de los diferentes departamentos ya se encontraban en ‘pants’ deportivos, uno de ellos en ‘shorts’. No había tiempo para el traje y la corbata.
Como nuestra estación no contaba con un noticiero (ni nuestras estaciones hermanas), el Director General comenzó a asignar responsabilidades, conforme íbamos llegando, a cada uno de los empleados. Teníamos que sacar resúmenes de los distintos noticieros en televisión. A mi me tocó tomar nota de todo lo que la cadena NBC decía por televisión.
Como pude, puse mi máxima atención a las noticias en Inglés y tomaba las notas traduciéndolas en ese mismo momento al Español.
Pasaba las hojitas con mis anotaciones a los locutores que se encontraban al aire esa mañana, pero a pesar de su talento y capacidad, lo que escuchaban los radioescuchas al aire, sonaba incompleto. Los comentarios de la locutora, sonaban redundantes, faltos de fuerza.
“¡Ay que pena!, … ¡que mal estuvo eso!, … ¡que horror!” y comentarios parecidos se le escuchaban decir, pero ni informaba de nada más, ni daba un contenido que sonara noticioso.
Pero no era su culpa; ella era animadora de un programa matutino, no periodista. Su capacidad estaba enfocada hacia otros puntos.
Cuando pasados unos días, tuvimos una de nuestras acostumbradas juntas, pudimos observar dos tremendos errores que se cometieron en nuestra transmisión al aire de esa mañana:
El ‘Servicio de Alertas para Emergencias’, nunca sonó. Para quienes no sepan de qué hablo, en los Estados Unidos constantemente la programación es interrumpida, para emitir el sonido de alerta, un sonido en forma de chicharra, que sonaría en caso de un tornado, temblor, incendio descomunal, inundación. Cuando se transmite, se hace es únicamente para probarlo (¿?).
Hasta la fecha, he tenido la fortuna de no escucharlo en una verdadera tragedia, pero supongo que interrumpe la programación, suena la alerta y avisa del tipo de instrucciones que debemos seguir.
Pues como te digo, la mentada alerta nunca sonó, nunca fue activada. Hubo el riesgo de que otro avión fuera secuestrado y en el caso de Los Angeles, fuese estrellado en Disneylandia, Hollywood o Beverly Hills.
Sin una alerta de este tipo, nadie en el mercado radiofónico del área de Los Angeles, habríamos sido notificados.
Pero esto no fue error de la estación, fue error del ‘Servicio Nacional de Emergencias’ en los Estados Unidos.
En donde si tuvimos falla, fue en el habernos aventurado a informar a nuestro auditorio, con personal no capacitado, para manejar una situación del tamaño de los ataques terroristas del 11 de Septiembre del 2001.
“Lo adecuado debió haber sido enlazarnos con uno de los noticieros en Español y lanzar el audio a nuestro auditorio”, nos dijo nuestro Director de Programación.
Y tenía toda la razón, cualquier cosa que salga por la bocina de un televisor en un noticiero, tiene el respaldo de la experiencia y todos los elementos para informar adecuada y eficazmente al auditorio. Sobre todo que lo hacen periodistas que precisamente a eso se dedican y al mismo tiempo, son personas que nuestro auditorio fácilmente identifica; se siente familiarizado con ellos porque al igual que nosotros, a ellos también los ven por el noticiero.
Yo espero que JAMÁS TENGAS QUE RECURRIR A ESTE CONSEJO, porque eso significaría que tu entorno y nuestro mundo, no sufriría de eventualidades monumentales. Lamentablemente sabemos que esto no es así, por lo que si en alguna ocasión el evento es extremadamente grave y tu estación u organización radiofónica no cuenta con acceso a la señal o al personal de un noticiero, puedes recurrir a ésta práctica diciendo algo parecido a esto:
“Nos informan que en estos momentos un avión acaba de estrellarse en uno de los edificios de la ciudad de Nueva York, apenas estamos viendo las imágenes por televisión y van surgiendo los detalles del accidente, esto aparentemente tiene consecuencias muy grandes pero vamos a enlazarnos con el noticiero del canal 36 aquí en (ciudad o poblado), para enterarnos exactamente de qué es lo que está pasando ……….” y sueltas el audio del televisor.
Lógicamente para esto, hay que establecer varios factores:
1. Que la idea sea aprobada por la Dirección General, Presidencia y/o Dirección de programación. 2. Que se cuente con un televisor portátil en cabina o un cableado hasta la consola.
3. Obviamente, que el Ingeniero realice esta conexión.
4. Y que el televisor esté encendido las 24 horas del día.
Si la desgracia sucede, simplemente deslizas el control y dejas el audio del noticiero para informar al auditorio.
Obviamente un procedimiento así debe tener sus reglas y el Director de Programación debe estar en contacto con la cabina ya sea en persona o desde donde se encuentre (vía telefónica), para decir cuanto tiempo se deja el audio con la noticia, si hay que sacrificar o no comerciales y si se continua con la música programada después de determinado tiempo, o si se utiliza una canción a manera de descanso y luego regresar al audio del noticiero, etc. Tu sabes a lo que me refiero.
Pero es aconsejable que haya alguien que decida si conviene que la noticia sea manejada ligeramente por el locutor en turno, o definitivamente se interrumpe la programación y se hace en el enlace con el noticiero por televisión.
Una noticia como el desastre que deja un temblor, quizá convenga a la ciudad o al país afectado, que se haga un enlace con la televisión, pero si el problema fue en Norteamérica y tu estación está en Centro, Sudamérica, España o el Caribe, quizá no sea necesario enlazarse con el noticiero por TV.
Roguemos por que no haya nunca necesidad de recurrir a este consejo, pero si lo inevitable sucede, por lo menos ya sabes qué es lo más conveniente para hacer.
“Parece que un avión se estrelló en Nueva York contra el edificio”, me dijo.
Al enterarme de esta tragedia mundial, donde pude observar la manera en la que las dos torres del World Trade Center se derrumbaban, no había otra cosa que hacer:
“Tengo que irme de inmediato a la estación”, pensé.
Al llegar ahí, los directores de los diferentes departamentos ya se encontraban en ‘pants’ deportivos, uno de ellos en ‘shorts’. No había tiempo para el traje y la corbata.
Como nuestra estación no contaba con un noticiero (ni nuestras estaciones hermanas), el Director General comenzó a asignar responsabilidades, conforme íbamos llegando, a cada uno de los empleados. Teníamos que sacar resúmenes de los distintos noticieros en televisión. A mi me tocó tomar nota de todo lo que la cadena NBC decía por televisión.
Como pude, puse mi máxima atención a las noticias en Inglés y tomaba las notas traduciéndolas en ese mismo momento al Español.
Pasaba las hojitas con mis anotaciones a los locutores que se encontraban al aire esa mañana, pero a pesar de su talento y capacidad, lo que escuchaban los radioescuchas al aire, sonaba incompleto. Los comentarios de la locutora, sonaban redundantes, faltos de fuerza.
“¡Ay que pena!, … ¡que mal estuvo eso!, … ¡que horror!” y comentarios parecidos se le escuchaban decir, pero ni informaba de nada más, ni daba un contenido que sonara noticioso.
Pero no era su culpa; ella era animadora de un programa matutino, no periodista. Su capacidad estaba enfocada hacia otros puntos.
Cuando pasados unos días, tuvimos una de nuestras acostumbradas juntas, pudimos observar dos tremendos errores que se cometieron en nuestra transmisión al aire de esa mañana:
El ‘Servicio de Alertas para Emergencias’, nunca sonó. Para quienes no sepan de qué hablo, en los Estados Unidos constantemente la programación es interrumpida, para emitir el sonido de alerta, un sonido en forma de chicharra, que sonaría en caso de un tornado, temblor, incendio descomunal, inundación. Cuando se transmite, se hace es únicamente para probarlo (¿?).
Hasta la fecha, he tenido la fortuna de no escucharlo en una verdadera tragedia, pero supongo que interrumpe la programación, suena la alerta y avisa del tipo de instrucciones que debemos seguir.
Pues como te digo, la mentada alerta nunca sonó, nunca fue activada. Hubo el riesgo de que otro avión fuera secuestrado y en el caso de Los Angeles, fuese estrellado en Disneylandia, Hollywood o Beverly Hills.
Sin una alerta de este tipo, nadie en el mercado radiofónico del área de Los Angeles, habríamos sido notificados.
Pero esto no fue error de la estación, fue error del ‘Servicio Nacional de Emergencias’ en los Estados Unidos.
En donde si tuvimos falla, fue en el habernos aventurado a informar a nuestro auditorio, con personal no capacitado, para manejar una situación del tamaño de los ataques terroristas del 11 de Septiembre del 2001.
“Lo adecuado debió haber sido enlazarnos con uno de los noticieros en Español y lanzar el audio a nuestro auditorio”, nos dijo nuestro Director de Programación.
Y tenía toda la razón, cualquier cosa que salga por la bocina de un televisor en un noticiero, tiene el respaldo de la experiencia y todos los elementos para informar adecuada y eficazmente al auditorio. Sobre todo que lo hacen periodistas que precisamente a eso se dedican y al mismo tiempo, son personas que nuestro auditorio fácilmente identifica; se siente familiarizado con ellos porque al igual que nosotros, a ellos también los ven por el noticiero.
Yo espero que JAMÁS TENGAS QUE RECURRIR A ESTE CONSEJO, porque eso significaría que tu entorno y nuestro mundo, no sufriría de eventualidades monumentales. Lamentablemente sabemos que esto no es así, por lo que si en alguna ocasión el evento es extremadamente grave y tu estación u organización radiofónica no cuenta con acceso a la señal o al personal de un noticiero, puedes recurrir a ésta práctica diciendo algo parecido a esto:
“Nos informan que en estos momentos un avión acaba de estrellarse en uno de los edificios de la ciudad de Nueva York, apenas estamos viendo las imágenes por televisión y van surgiendo los detalles del accidente, esto aparentemente tiene consecuencias muy grandes pero vamos a enlazarnos con el noticiero del canal 36 aquí en (ciudad o poblado), para enterarnos exactamente de qué es lo que está pasando ……….” y sueltas el audio del televisor.
Lógicamente para esto, hay que establecer varios factores:
1. Que la idea sea aprobada por la Dirección General, Presidencia y/o Dirección de programación. 2. Que se cuente con un televisor portátil en cabina o un cableado hasta la consola.
3. Obviamente, que el Ingeniero realice esta conexión.
4. Y que el televisor esté encendido las 24 horas del día.
Si la desgracia sucede, simplemente deslizas el control y dejas el audio del noticiero para informar al auditorio.
Obviamente un procedimiento así debe tener sus reglas y el Director de Programación debe estar en contacto con la cabina ya sea en persona o desde donde se encuentre (vía telefónica), para decir cuanto tiempo se deja el audio con la noticia, si hay que sacrificar o no comerciales y si se continua con la música programada después de determinado tiempo, o si se utiliza una canción a manera de descanso y luego regresar al audio del noticiero, etc. Tu sabes a lo que me refiero.
Pero es aconsejable que haya alguien que decida si conviene que la noticia sea manejada ligeramente por el locutor en turno, o definitivamente se interrumpe la programación y se hace en el enlace con el noticiero por televisión.
Una noticia como el desastre que deja un temblor, quizá convenga a la ciudad o al país afectado, que se haga un enlace con la televisión, pero si el problema fue en Norteamérica y tu estación está en Centro, Sudamérica, España o el Caribe, quizá no sea necesario enlazarse con el noticiero por TV.
Roguemos por que no haya nunca necesidad de recurrir a este consejo, pero si lo inevitable sucede, por lo menos ya sabes qué es lo más conveniente para hacer.
Radio Tip # 45 (Coloca tu mensaje dentro de un buen contexto)
Impacto
Como locutor, es importante que lo que vas a decir después de abrir el micrófono, vaya colocado dentro de un contexto … y este contexto tiene que ser relevante a las vidas de tus radioescuchas.
Pero no nada mas eso, sino que también tiene que hacer un IMPACTO.
Si por ejemplo, un seminarista se encuentra frente a los asistentes y para introducir el siguiente tópico les dice, “Aquí tienen el siguiente tema en mi lista”, esto se diferencia enormemente de colocar su propósito dentro de un contexto más interesante y decir, “A continuación, voy a proporcionarles algo que pueden comenzar a aplicar mañana mismo y que les va a aumentar los resultados que esperan”.
Es la misma pieza de información, pero el último contexto tiene MAS IMPACTO que el primero.
¿Obvio, verdad?, … entonces, ¿por qué algunos locutores se lanzan al aire dentro de contextos como, “A ver, … veamos qué más tenemos por aquí”?
Esto no es un contexto lo suficientemente fuerte como para llamar la atención del auditorio, como tampoco lo es el introducir un concurso con un, “ … y es la hora de regalar unos premios”.
Un locutor necesita hacer un esfuerzo considerable y serio, para entregar un trabajo en verdad profesional.
Lo he dicho y lo seguiré diciendo, “Llegar a ser un locutor exitoso no es tarea fácil. Hay mucho que preparar antes de salir al aire y mucho, … mucho trabajo por hacer”.
Y el sugerirte buscar la forma de entregar tus comentarios dentro de un contexto relevante y de impacto, es otra actividad más, que tienes que tomar en cuenta.
Suspenso
En una ocasión, cuando Alfred Hitchcock se encontraba trabajando en la historia de una película, le dijo a su colaborador, “En otras palabras, estamos regresando otra vez a nuestras alternativas de siempre: Queremos crear suspenso o crear sorpresa, ¿no?".
Hitchcock creía que el suspenso "es el medio más poderoso para sostener la atención de los espectadores".
En radio, la EMOCIÓN es el método más poderoso de sostener la atención del radioescucha, aunque el suspenso y la sorpresa son cruciales a la programación de una estación exitosa de radio.
Pero, ¿cuándo existe el suspenso en el radio?
Como locutor, es importante que lo que vas a decir después de abrir el micrófono, vaya colocado dentro de un contexto … y este contexto tiene que ser relevante a las vidas de tus radioescuchas.
Pero no nada mas eso, sino que también tiene que hacer un IMPACTO.
Si por ejemplo, un seminarista se encuentra frente a los asistentes y para introducir el siguiente tópico les dice, “Aquí tienen el siguiente tema en mi lista”, esto se diferencia enormemente de colocar su propósito dentro de un contexto más interesante y decir, “A continuación, voy a proporcionarles algo que pueden comenzar a aplicar mañana mismo y que les va a aumentar los resultados que esperan”.
Es la misma pieza de información, pero el último contexto tiene MAS IMPACTO que el primero.
¿Obvio, verdad?, … entonces, ¿por qué algunos locutores se lanzan al aire dentro de contextos como, “A ver, … veamos qué más tenemos por aquí”?
Esto no es un contexto lo suficientemente fuerte como para llamar la atención del auditorio, como tampoco lo es el introducir un concurso con un, “ … y es la hora de regalar unos premios”.
Un locutor necesita hacer un esfuerzo considerable y serio, para entregar un trabajo en verdad profesional.
Lo he dicho y lo seguiré diciendo, “Llegar a ser un locutor exitoso no es tarea fácil. Hay mucho que preparar antes de salir al aire y mucho, … mucho trabajo por hacer”.
Y el sugerirte buscar la forma de entregar tus comentarios dentro de un contexto relevante y de impacto, es otra actividad más, que tienes que tomar en cuenta.
Suspenso
En una ocasión, cuando Alfred Hitchcock se encontraba trabajando en la historia de una película, le dijo a su colaborador, “En otras palabras, estamos regresando otra vez a nuestras alternativas de siempre: Queremos crear suspenso o crear sorpresa, ¿no?".
Hitchcock creía que el suspenso "es el medio más poderoso para sostener la atención de los espectadores".
En radio, la EMOCIÓN es el método más poderoso de sostener la atención del radioescucha, aunque el suspenso y la sorpresa son cruciales a la programación de una estación exitosa de radio.
Pero, ¿cuándo existe el suspenso en el radio?
CUANDO EL AUDITORIO SE PREGUNTA QUÉ ES LO QUE VA A PASAR DESPUÉS.
Un ejemplo común es el uso de “teasers” (ver "Radio Tips" # 20) y aquí te expongo una muestra:
"En unos instantes, escucharemos la canción de Los Beatles que dejaron hasta el final de la sesión de grabación, porque sabían que la voz de John Lennon iba a terminar arruinada completamente ese día y nada mas le podían dar una toma”.
Cuando agregas este pedacito de contexto ANTES de tocar "Twist & Shout", aumentas el interés del auditorio y logras poner en suspenso a la audiencia.
No el suspenso barato que algunos locutores flojos (esos que creen que ser locutor es nada mas abrir el micrófono y decir cualquier cosa que se les ocurra), aplican para salir del compromiso.
"En unos instantes, escucharemos la canción de Los Beatles que dejaron hasta el final de la sesión de grabación, porque sabían que la voz de John Lennon iba a terminar arruinada completamente ese día y nada mas le podían dar una toma”.
Cuando agregas este pedacito de contexto ANTES de tocar "Twist & Shout", aumentas el interés del auditorio y logras poner en suspenso a la audiencia.
No el suspenso barato que algunos locutores flojos (esos que creen que ser locutor es nada mas abrir el micrófono y decir cualquier cosa que se les ocurra), aplican para salir del compromiso.
No. Tienes que preocuparte porque sea un suspenso eficaz, serio, bien dirigido y estructurado.
“El arte de crear suspenso, es también el arte de involucrar a la audiencia”, dijo el también director de cine, Francois Truffaut.
Entonces, no es suficiente decir, “Tengo algo interesante más adelante, que no te puedo decir”.
Tienes que involucrar a tu audiencia. Tienes que lograr que en verdad QUIERAN escuchar que es lo que viene a continuación.
El famoso locutor en los Estados Unidos, Howard Stern, nos pone un buen ejemplo de cómo lograr esto, cuando en una ocasión le dijo a su compañera al aire lo siguiente:
“ ... entonces, cuando llegué ayer a mi casa, la sirvienta me dijo que en la noche me había llamado Jessica Hahn" (No te preocupes por saber quien es Jessica Hahn. Es una de esas bellezas rubias que no tienen cerebro. Se les llama "Bimbos", en los Estados Unidos).
"Y yo le dije, … ¡Oh! … entonces ella me dijo ...”,
"Si, … y llamó junto con otro señor que siempre le llama”.
"Y yo trataba de recordar quién podría conocer a Jessica Hahn. Entonces me acordé de Andy Bloom. Le dije, ¿es Andy Bloom? Y me dijo, … ¡si!”.
"Pues que subo corriendo las escaleras para escuchar el mensaje y cuando lo oí, no lo podía creer. Y aquí lo traigo. Yo sé que vas a querer escucharlo …”.
Difícilmente alguien en el auditorio en esos instantes, habría querido cambiarle de estación.
Dime tu si esto es un buen contexto, ¿o utilizamos el contexto del locutor flojo y sin aspiraciones que cree que por tener buena voz y "salir en la radio", se cree la última cerveza del estadio?
Un individuo así diría,
“Y anoche Jessica Hahn dejó este mensaje en mi contestadora. Esto fue lo que dejó”.
Hazlos que le INTERESE el tema, una vez logrado, hazlos ESPERAR.
¡Así es como creas SUSPENSO!
Sorpresa
Recuerda, Alfred Hitchcock tenía DOS elecciones cuando quería moverse en su historia:
Suspenso...y Sorpresa.
Sorpresa es algo sucediendo en el CONTEXTO EQUIVOCADO.
Sin contexto, no puede haber sorpresa.
Si en un noticiero, al momento de dar una noticia seria, un teléfono celular suena con esos timbres graciosos que a todos nos ha tocado oír, se crea una sorpresa.
¿Por qué?, pues porque se da dentro del contexto equivocado.
Interés
Para finalizar, el interés que una audiencia le pone a cualquier cosa, NUNCA PERMANECE CONSTANTE. Si no lo aumentas, se te va, se te pierden.
Tus radioescuchas solo se mantendrán interesados cuando el interés AUMENTA.
Y esto representa todavía más trabajo por hacer en tu cabina.
Entonces, hacer radio no es fácil, ¿verdad?
Radio Tip # 44 (Adueñándose de la situación)
Con esto de la seguridad en los aeropuertos, en la mayoría de los más transitados del mundo es obvio que se formen largas filas de pasajeros antes de pasar por los arcos de seguridad.
En este escenario que te describo, quiero contarte sobre el buen tino que tuvo en una ocasión un empleado de seguridad del aeropuerto O’Hare de la ciudad de Chicago, para demostrar lo importante que es ADUEÑARSE DE LA SITUACIÓN.
Se encontraba a eso de las 7 de la mañana, trabajando en un arco del cual se formaba una larga, pero muy larga fila.
Haciendo cálculos, se percató de que habría pasajeros que con seguridad iban a perder su vuelo, pero no había forma de avisarles. Si lo hacía, el sitio se volvería un caos además de perder mucho tiempo en el intento.
¿Qué hizo entonces?
Sin saberlo, el individuo SE ADUEÑÓ DE LA SITUACIÓN.
“¿Me permiten su atención por favor?”, les grito a través de un megáfono. “Quiero comunicarles que el tiempo promedio por pasajero para pasar la revisión, es de 45 segundos. Aquellos pasajeros que vienen con laptops, van a tardar 30 segundos más, por lo que es importante que las saquen de sus estuches y las tengan listas para ser más eficientes en la revisión”.
Se dirigió entonces a los pasajeros que se encontraban hasta el final de la línea.
“¿Me escucharon hasta allá atrás?” y los pasajeros asintieron o levantaron sus brazos.
“¡Muy bien!”, les dijo, “aquellos que van al vuelo 345, les comunico que están ya por abordar, pero por favor, no se desesperen porque esto lo tengo muy presente. Cuando vea que el tiempo se esté acabando, los voy a pasar adelante, pero mientras tanto, por favor permanezcan en sus lugares”.
Y controlado E INFORMADO el pasaje, el equipo de seguridad continuo con sus actividades.
Pasados 20 minutos, volvió a repetir la información. Esta vez, volviéndose a dirigir a los pasajeros del final de la línea, que tenían que abordar el vuelo 345.
“Sigo pendiente de ustedes … todavía nos quedan 10 minutos, si veo que no avanzan, yo mismo les daré preferencia para que puedan pasar abordar sin problemas”.
Increíblemente el mundo de gente que se encontraba formada, acató las órdenes, permaneció en orden y no hubo ni el más mínimo incidente. Nadie se enojó, nadie se salió de la línea, nadie abordó tarde.
Esta anécdota te servirá para resaltar la importancia que tiene el que TE ADUEÑES DE LA SITUACIÓN cuando sea necesario.
En radio es común asistir a eventos como representante de la estación y es común el desorden de los asistentes cuando quieren pasar a la foto con el artista, el autógrafo o simplemente para acercarte a ti, la estrella de la radio.
Pues alguien tiene que ADUEÑARSE DE LA SITUACIÓN. Puedes ser tu mismo o algún otro representante de la emisora o del evento.
Si observas con detenimiento, la clave de todo esto ES LA INFORMACIÓN.
Cuando tienes informada a la gente de lo que está sucediendo, usualmente reduces mucho la ansiedad y la desorientación, ya que es natural que con la desesperación, la gente comience a inventar, a escuchar mal y trasgiversar las cosas.
En el caso de estar al aire, también aplica este consejo, ya que si tienes a dos radioescuchas simultáneamente al aire en llamadas telefónicas, o a dos invitados en cabina, un radioescucha al aire más uno o dos compañeros locutores, pues son bastantes voces que en caso de discusión o aferramiento a un tema, se olvidan de aspectos y continuidad de los compromisos de la estación.
Si TE ADUEÑAS DE LA SITUACIÓN, los comerciales, saldrán a tiempo, la identificación de la hora también, las discrepancias o desviaciones del tema o las terminas o las desvías, pero por lo menos hay alguien que tiene el mando o está controlando el asunto o las circunstancias.
Lo mismo sucede con las llamadas al aire, hay ocasiones en las que TIENES QUE ADUEÑARTE DE LA SITUACIÓN. Tienes que poner orden al concurso y/o a los participantes.
Aplica esto y resultará una experiencia positiva para todo mundo.
En este escenario que te describo, quiero contarte sobre el buen tino que tuvo en una ocasión un empleado de seguridad del aeropuerto O’Hare de la ciudad de Chicago, para demostrar lo importante que es ADUEÑARSE DE LA SITUACIÓN.
Se encontraba a eso de las 7 de la mañana, trabajando en un arco del cual se formaba una larga, pero muy larga fila.
Haciendo cálculos, se percató de que habría pasajeros que con seguridad iban a perder su vuelo, pero no había forma de avisarles. Si lo hacía, el sitio se volvería un caos además de perder mucho tiempo en el intento.
¿Qué hizo entonces?
Sin saberlo, el individuo SE ADUEÑÓ DE LA SITUACIÓN.
“¿Me permiten su atención por favor?”, les grito a través de un megáfono. “Quiero comunicarles que el tiempo promedio por pasajero para pasar la revisión, es de 45 segundos. Aquellos pasajeros que vienen con laptops, van a tardar 30 segundos más, por lo que es importante que las saquen de sus estuches y las tengan listas para ser más eficientes en la revisión”.
Se dirigió entonces a los pasajeros que se encontraban hasta el final de la línea.
“¿Me escucharon hasta allá atrás?” y los pasajeros asintieron o levantaron sus brazos.
“¡Muy bien!”, les dijo, “aquellos que van al vuelo 345, les comunico que están ya por abordar, pero por favor, no se desesperen porque esto lo tengo muy presente. Cuando vea que el tiempo se esté acabando, los voy a pasar adelante, pero mientras tanto, por favor permanezcan en sus lugares”.
Y controlado E INFORMADO el pasaje, el equipo de seguridad continuo con sus actividades.
Pasados 20 minutos, volvió a repetir la información. Esta vez, volviéndose a dirigir a los pasajeros del final de la línea, que tenían que abordar el vuelo 345.
“Sigo pendiente de ustedes … todavía nos quedan 10 minutos, si veo que no avanzan, yo mismo les daré preferencia para que puedan pasar abordar sin problemas”.
Increíblemente el mundo de gente que se encontraba formada, acató las órdenes, permaneció en orden y no hubo ni el más mínimo incidente. Nadie se enojó, nadie se salió de la línea, nadie abordó tarde.
Esta anécdota te servirá para resaltar la importancia que tiene el que TE ADUEÑES DE LA SITUACIÓN cuando sea necesario.
En radio es común asistir a eventos como representante de la estación y es común el desorden de los asistentes cuando quieren pasar a la foto con el artista, el autógrafo o simplemente para acercarte a ti, la estrella de la radio.
Pues alguien tiene que ADUEÑARSE DE LA SITUACIÓN. Puedes ser tu mismo o algún otro representante de la emisora o del evento.
Si observas con detenimiento, la clave de todo esto ES LA INFORMACIÓN.
Cuando tienes informada a la gente de lo que está sucediendo, usualmente reduces mucho la ansiedad y la desorientación, ya que es natural que con la desesperación, la gente comience a inventar, a escuchar mal y trasgiversar las cosas.
En el caso de estar al aire, también aplica este consejo, ya que si tienes a dos radioescuchas simultáneamente al aire en llamadas telefónicas, o a dos invitados en cabina, un radioescucha al aire más uno o dos compañeros locutores, pues son bastantes voces que en caso de discusión o aferramiento a un tema, se olvidan de aspectos y continuidad de los compromisos de la estación.
Si TE ADUEÑAS DE LA SITUACIÓN, los comerciales, saldrán a tiempo, la identificación de la hora también, las discrepancias o desviaciones del tema o las terminas o las desvías, pero por lo menos hay alguien que tiene el mando o está controlando el asunto o las circunstancias.
Lo mismo sucede con las llamadas al aire, hay ocasiones en las que TIENES QUE ADUEÑARTE DE LA SITUACIÓN. Tienes que poner orden al concurso y/o a los participantes.
Aplica esto y resultará una experiencia positiva para todo mundo.
Radio Tip # 43 (Aprendiendo a conocer qué es lo que le interesa al auditorio)
Como locutor de radio llegas a la estación con la esperanza de que AL MENOS UN TEMA sea del interés del auditorio; lo suficientemente bueno como para que llamen a cabina y genere controversia.
Sin embargo, no sirve el que llegues y le digas a tu Productor, a tu Director o incluso a tu Auditorio, “Tengo algo que espero te interese”.
Hay que definir primero cómo inicias tus conversaciones en la vida real. ¿Cuando llegas a una reunión dices, “Tengo varios temas que pudieran ser de tu interés para discutir”? o ¿únicamente comienzas con algo que es de tu interés y que es suficiente razón como para que pienses que les va a interesar a los otros?
Existió una profesora de actuación que se llamó Uta Hagen y acostumbraba decir que, “Si tu estás interesado, … eres interesante”.
Para ilustrarlo, ponía el ejemplo de los actores que en un lado del escenario, se encontraban sacando sus emociones y técnicas de actuación con toda la intensidad posible.
Del otro lado del escenario, se encontraba un gato mirando una pluma que caía lentamente hacia el piso.
Y cada mirada de la audiencia se encontraba concentrada en, … ¡el gato!
La razón fue porque el gato ESTABA 100 POR CIENTO INTERESADO EN EL MOVIMIENTO DE ESA PLUMA.
Esto nos lleva a determinar que para que sepas de qué hablar en cualquier día, necesitas responder a una de éstas preguntas:
"¿En qué estoy interesado?" y "¿En qué están interesados mis radioescuchas?".
Para poder determinar lo que les interesa a tus radioescuchas, es importante que investigues y analices 3 aspectos:
¿Qué es lo que más necesitan?, … ¿qué es lo que más quieren? y … ¿a qué es lo que más temen?
Si tienes una relación con tus radioescuchas y tienes la habilidad de involucrarlos en una conversación, ya sea real, de cara a cara o a través de la radio, donde lo que te responderían verbalmente lo harían mentalmente, si estás interesado en un tema, hay buenas posibilidades de que ellos estén también interesados en él.
Nada mas procura que de lo que hables, sea de temas que a ellos les importan, no de temas que tu has decidido que les debería de importar basado en las noticias del día o de lo que viste en una revista.
Pero, … ¿cómo puedes estar seguro de las cosas que a tus radioescuchas les interesa?
Ellos te van a decir … si los escuchas.
Hubo una ocasión en la que un locutor en Inglaterra, para conmemorar el aniversario número 40 del asesinato de John F. Kennedy, invitó a dos expertos en teorías de conspiración.
Los expertos estuvieron en desacuerdos mutuos, el locutor les dio las gracias por su participación y les pidió a sus radioescuchas que llamaran para decirle en qué pensaban:
En que Kennedy fue asesinado por un individuo solitario o hubo una conspiración detrás de todo esto.
Abrió los micrófonos y dio el número en cabina varias veces para que el auditorio pudiera externar sus opiniones.
Nadie llamó.
En un acto de desesperación, el locutor comenzó a llenar el tiempo.
Mencionó que él recordaba exactamente lo que se encontraba haciendo cuando supo que John F. Kennedy había sido balaceado:
Se encontraba viendo un programa por televisión llamado “Double Your Money” (Dobla Tu Dinero). Y AHÍ fue cuando los teléfonos comenzaron a sonar.
Al igual que yo cuando me enteré de la historia de éste locutor, de inmediato pensé que la gente comenzó a llamar para compartir sus momentos de lo que se encontraban haciendo cuando Kennedy fue asesinado.
Pues no.
La gente llamó para decir que el programa no era “Double Your Money”, sino “Harry Worth”.
Y por el resto de la hora, los radioescuchas llamaron frenéticamente para saber lo que se encontraba en televisión cuando salieron las noticias que anunciaban el asesinato del Presidente Kennedy.
Yo, Emilio Pastrana, soy un fuerte creyente de la preparación de un programa. Te lo he dicho en estos “Tips de Radio” y lo seguiré diciendo.
Sin embargo, hasta la mejor preparación de un programa o turno al aire, no es mas que UN ESTIMADO de lo que ocurrirá en tu espacio al aire el día de hoy.
No importa cuanta preparación tuviste que hacer y reunir para tu programa. No importa cuanto tiempo tuviste que invertir para ello. No importa si hasta tuviste que realizar gastos para lograrlo. SI LA AUDIENCIA TE DICE QUE ESTAN INTERSADOS EN ALGO MAS, SERIAS MUY TONTO SI NO LOS ESCUCHAS.
Cuando entrevistas a celebridades o políticos, ¿cómo puedes saber qué preguntas le gustaría a tu auditorio que les fuesen contestadas?
Preguntándoles.
Pero no lo vayas a hacer al principio del programa, rogando que te llamen. Si el jueves vas a tener la entrevista, pregúntales el martes. Y si hay algo QUE DEFINITIVAMENTE LE QUISIERAN PREGUNTAR, pídeles que te envíen un mensaje de texto o un correo electrónico.
Procura que sea una dirección especial destinada precisamente para preguntas del auditorio, como preguntas@radiox.com .
Como locutor, productor o incluso, interno, puedes darle un vistazo a las preguntas y descubrir dos cosas:
1. Muy buenas preguntas que a ti no se te habían ocurrido.
2. Una demanda obvia de respuestas a una o dos preguntas en particular.
Pero MUCHO CUIDADO en preguntar cualquier pregunta que los radioescuchas sugieran. La sugerencia dice QUE SI LES DAS LA OPORTUNIDAD, ellos te van a ayudar a que programes tu espacio de forma que sea más relevante e interesante a ellos.
Sin embargo, no sirve el que llegues y le digas a tu Productor, a tu Director o incluso a tu Auditorio, “Tengo algo que espero te interese”.
Hay que definir primero cómo inicias tus conversaciones en la vida real. ¿Cuando llegas a una reunión dices, “Tengo varios temas que pudieran ser de tu interés para discutir”? o ¿únicamente comienzas con algo que es de tu interés y que es suficiente razón como para que pienses que les va a interesar a los otros?
Existió una profesora de actuación que se llamó Uta Hagen y acostumbraba decir que, “Si tu estás interesado, … eres interesante”.
Para ilustrarlo, ponía el ejemplo de los actores que en un lado del escenario, se encontraban sacando sus emociones y técnicas de actuación con toda la intensidad posible.
Del otro lado del escenario, se encontraba un gato mirando una pluma que caía lentamente hacia el piso.
Y cada mirada de la audiencia se encontraba concentrada en, … ¡el gato!
La razón fue porque el gato ESTABA 100 POR CIENTO INTERESADO EN EL MOVIMIENTO DE ESA PLUMA.
Esto nos lleva a determinar que para que sepas de qué hablar en cualquier día, necesitas responder a una de éstas preguntas:
"¿En qué estoy interesado?" y "¿En qué están interesados mis radioescuchas?".
Para poder determinar lo que les interesa a tus radioescuchas, es importante que investigues y analices 3 aspectos:
¿Qué es lo que más necesitan?, … ¿qué es lo que más quieren? y … ¿a qué es lo que más temen?
Si tienes una relación con tus radioescuchas y tienes la habilidad de involucrarlos en una conversación, ya sea real, de cara a cara o a través de la radio, donde lo que te responderían verbalmente lo harían mentalmente, si estás interesado en un tema, hay buenas posibilidades de que ellos estén también interesados en él.
Nada mas procura que de lo que hables, sea de temas que a ellos les importan, no de temas que tu has decidido que les debería de importar basado en las noticias del día o de lo que viste en una revista.
Pero, … ¿cómo puedes estar seguro de las cosas que a tus radioescuchas les interesa?
Ellos te van a decir … si los escuchas.
Hubo una ocasión en la que un locutor en Inglaterra, para conmemorar el aniversario número 40 del asesinato de John F. Kennedy, invitó a dos expertos en teorías de conspiración.
Los expertos estuvieron en desacuerdos mutuos, el locutor les dio las gracias por su participación y les pidió a sus radioescuchas que llamaran para decirle en qué pensaban:
En que Kennedy fue asesinado por un individuo solitario o hubo una conspiración detrás de todo esto.
Abrió los micrófonos y dio el número en cabina varias veces para que el auditorio pudiera externar sus opiniones.
Nadie llamó.
En un acto de desesperación, el locutor comenzó a llenar el tiempo.
Mencionó que él recordaba exactamente lo que se encontraba haciendo cuando supo que John F. Kennedy había sido balaceado:
Se encontraba viendo un programa por televisión llamado “Double Your Money” (Dobla Tu Dinero). Y AHÍ fue cuando los teléfonos comenzaron a sonar.
Al igual que yo cuando me enteré de la historia de éste locutor, de inmediato pensé que la gente comenzó a llamar para compartir sus momentos de lo que se encontraban haciendo cuando Kennedy fue asesinado.
Pues no.
La gente llamó para decir que el programa no era “Double Your Money”, sino “Harry Worth”.
Y por el resto de la hora, los radioescuchas llamaron frenéticamente para saber lo que se encontraba en televisión cuando salieron las noticias que anunciaban el asesinato del Presidente Kennedy.
Yo, Emilio Pastrana, soy un fuerte creyente de la preparación de un programa. Te lo he dicho en estos “Tips de Radio” y lo seguiré diciendo.
Sin embargo, hasta la mejor preparación de un programa o turno al aire, no es mas que UN ESTIMADO de lo que ocurrirá en tu espacio al aire el día de hoy.
No importa cuanta preparación tuviste que hacer y reunir para tu programa. No importa cuanto tiempo tuviste que invertir para ello. No importa si hasta tuviste que realizar gastos para lograrlo. SI LA AUDIENCIA TE DICE QUE ESTAN INTERSADOS EN ALGO MAS, SERIAS MUY TONTO SI NO LOS ESCUCHAS.
Cuando entrevistas a celebridades o políticos, ¿cómo puedes saber qué preguntas le gustaría a tu auditorio que les fuesen contestadas?
Preguntándoles.
Pero no lo vayas a hacer al principio del programa, rogando que te llamen. Si el jueves vas a tener la entrevista, pregúntales el martes. Y si hay algo QUE DEFINITIVAMENTE LE QUISIERAN PREGUNTAR, pídeles que te envíen un mensaje de texto o un correo electrónico.
Procura que sea una dirección especial destinada precisamente para preguntas del auditorio, como preguntas@radiox.com .
Como locutor, productor o incluso, interno, puedes darle un vistazo a las preguntas y descubrir dos cosas:
1. Muy buenas preguntas que a ti no se te habían ocurrido.
2. Una demanda obvia de respuestas a una o dos preguntas en particular.
Pero MUCHO CUIDADO en preguntar cualquier pregunta que los radioescuchas sugieran. La sugerencia dice QUE SI LES DAS LA OPORTUNIDAD, ellos te van a ayudar a que programes tu espacio de forma que sea más relevante e interesante a ellos.
17.2.09
Radio Tip # 42 (Por qué el locutor nunca se debe de ver mal en compromisos)
Constantemente tu como locutor, te ves ante los ojos de amigos, familiares y radioescuchas como EL TODO PODEROSO. ¿Por qué?, pues porque regalas cosas, das boletos para conciertos, das boletos para eventos, conoces y entrevistas a gente famosa y además sales en el radio.
La impresión que das, es que eres alguien con PODER.
Y en cierta forma la tienes, solo que debes ajustarte a normas y principios. Esto tu lo sabes, ellos no.
Pero debido a esto, es inevitable que la gente se acerque a ti para solicitarte “unos boletos” o anunciar tal o cual cosa. Sobre todo cuando se trata de ayuda para aspectos de caridad o extravío de personas o pertenencias. Sin embargo, sabes muy bien que no tienes la autoridad suficiente como para complacerlos.
¿Qué hacer en este caso?
Tienes que pasar ‘la papa caliente’ a otro.
¿La razón?, …...
PORQUE COMO LOCUTOR NUNCA TE DEBES DE VER MAL. NUNCA DEBES NEGAR NADA.
Quienes son los ogros o ‘los malos de la historia’, deben ser tus jefes, no tu.
La imagen de un locutor debe ser siempre impecable. Bajo ningún motivo y bajo ninguna circunstancia, te debes ver mal ante los ojos (o los oídos) de tu auditorio, clientes de la estación o quien quiera que sea. Se supone que como locutor eres complaciente, buena persona, eres positivo, … ¡lo máximo!
Es parte de tu imagen y es parte de tus funciones.
Si por ejemplo eres una persona popular y ha llegado la hora de despedirte en un evento pero la gente no te quiere dejar ir y de cualquier forma te vas, la culpa tiene que ser de “esa persona que te dice que ya te tienes que ir”.
Si por alguna razón estás en un área privilegiada o restringida en un concierto y a quien conozcas te hace señas para que lo ayudes a pasar a esa área, échale la culpa a otros.
“Es que aquí está mi Director y si me ve haciendo esto me va a llamar la atención y yo no quiero problemas”, puedes decir para zafarte del compromiso.
Tomar estas precauciones te ayudará a consolidarte, a avanzar en tu carrera y a sostenerte en este campo que aunque se ve fácil, es un tanto difícil en ocasiones y más que nada COMPROMETEDOR.
Si por ejemplo un radioescucha te habla por teléfono a cabina y te pide boletos para un concierto, basta y sobra con que digas que los tienes contados y que los tienes que regalar al aire.
Un comentario como, “…. Es que tengo únicamente dos juegos de boletos por hora y está marcado que los tengo que regalar al aire”, logra zafarte del compromiso.
Yo normalmente acostumbro pedirle a mi equipo de locutores, que para cualquier cosa comprometedora, me culpen a mi.
“Yo soy el malo, … déjenme a mi ser el malo, … dejen que sea yo el que se vea mal, el que niega las cosas, pero no ustedes, … ¡nunca ustedes!”, les digo.
Y así debe ser. Entre las múltiples labores de un Director de Programación (o Director Artístico), es de proteger y escudar a sus locutores. Es la de ayudarlos a conservar esa imagen que tantos esfuerzos cuesta obtener.
Si debido a las relaciones públicas de un locutor, este o esta se ve comprometido(a) cuando le solicitan “un tiempecito al aire” para promover tal o cual cosa, él o la locutora debe de inmediato apoyarse en su Director y aventarle el compromiso.
“Mira, para poder mencionar esto que me pides, tiene que pasar por el Director de Programación. Te voy a dar la dirección de su correo electrónico y así lo tratas directamente con él (o ella)”.
Si esta persona niega la petición, quien se ve mal es precisamente esa persona no el locutor.
“¿No quiso?, … ¡ay que pena!, … pero yo no puedo hacer nada si no lo autoriza él”.
¿El locutor?, en este caso se vio bien. Intento ayudar y estaba dispuesto a complacer la solicitud, pero no estaba en sus manos solucionar el caso.
¿El Jefe?, en este caso se vio como un desgraciado infeliz. ¿Qué le costaba? ¡Ni que la radio fuera de él! ¡Ojala se pudra en un desierto! ( … comentarios similares a menudo van en contra de los Directores de Programación, pero ¡hey!, ¿queríamos estar en radio, ¿no?).
Otro aspecto muy común es cuando gentes del medio o incluso, clientes que se anuncian en la estación, consienten con exceso a un locutor.
La razón es que la mayoría piensa que como es quien esta al aire, pues fácilmente puede pasarles un comercial gratis al aire, una mención simplemente o hacerse “su amigo” y extender así su red de relaciones.
Tampoco falta quien de la nada, sin motivo, razón aparente y en muchas ocasiones, sin avisar, te lleva comida.
Siempre hay radioescuchas “considerados” con sus locutores favoritos.
“¡Que bueno es el ser locutor!”, piensa uno de inmediato.
Pues, … ¡ten mucho cuidado!, una pizza, unas papitas, un refresco, gaseosa o soda, una invitación a comer, una cubeta llena de cervezas en un club nocturno, una fastuosa cena en un restaurant de prestigio, son suficiente para COMPROMETERTE y esos tratos, esas invitaciones y ese consentimiento, tarde o temprano buscarán su compensación.
Entonces, mi consejo es para comenzar, no aceptar nada de esto. Si no aceptas nada, no te comprometes a nada. Fin de la historia.
Si te insisten mucho, busca la forma de dejar claro que aceptaste porque te insistieron, no porque quisiste.
Segundo, si por alguna razón te ves envuelto(a) en el compromiso, DE INMEDIATO ENCAMINA LA SITUACIÓN con tu Director de Programación o con Productor y di que esa persona es quien controla tal o cual cosa o es quien evita el que la hagas.
Pero tienes que salirte del compromiso y volver a tu pedestal de ser la persona amable, positiva y buena.
Y para ti Productor, Director o Jefe de locutores, por si no lo sabías, una de tus funciones en caso de enfrentar algo así, es ser el ‘malo de la historia’. Ser el escudo que protege al locutor y lo saca de la situación comprometedora.
Aunque en este caso, seas tu el que se eche enemigos eternos.
La impresión que das, es que eres alguien con PODER.
Y en cierta forma la tienes, solo que debes ajustarte a normas y principios. Esto tu lo sabes, ellos no.
Pero debido a esto, es inevitable que la gente se acerque a ti para solicitarte “unos boletos” o anunciar tal o cual cosa. Sobre todo cuando se trata de ayuda para aspectos de caridad o extravío de personas o pertenencias. Sin embargo, sabes muy bien que no tienes la autoridad suficiente como para complacerlos.
¿Qué hacer en este caso?
Tienes que pasar ‘la papa caliente’ a otro.
¿La razón?, …...
PORQUE COMO LOCUTOR NUNCA TE DEBES DE VER MAL. NUNCA DEBES NEGAR NADA.
Quienes son los ogros o ‘los malos de la historia’, deben ser tus jefes, no tu.
La imagen de un locutor debe ser siempre impecable. Bajo ningún motivo y bajo ninguna circunstancia, te debes ver mal ante los ojos (o los oídos) de tu auditorio, clientes de la estación o quien quiera que sea. Se supone que como locutor eres complaciente, buena persona, eres positivo, … ¡lo máximo!
Es parte de tu imagen y es parte de tus funciones.
Si por ejemplo eres una persona popular y ha llegado la hora de despedirte en un evento pero la gente no te quiere dejar ir y de cualquier forma te vas, la culpa tiene que ser de “esa persona que te dice que ya te tienes que ir”.
Si por alguna razón estás en un área privilegiada o restringida en un concierto y a quien conozcas te hace señas para que lo ayudes a pasar a esa área, échale la culpa a otros.
“Es que aquí está mi Director y si me ve haciendo esto me va a llamar la atención y yo no quiero problemas”, puedes decir para zafarte del compromiso.
Tomar estas precauciones te ayudará a consolidarte, a avanzar en tu carrera y a sostenerte en este campo que aunque se ve fácil, es un tanto difícil en ocasiones y más que nada COMPROMETEDOR.
Si por ejemplo un radioescucha te habla por teléfono a cabina y te pide boletos para un concierto, basta y sobra con que digas que los tienes contados y que los tienes que regalar al aire.
Un comentario como, “…. Es que tengo únicamente dos juegos de boletos por hora y está marcado que los tengo que regalar al aire”, logra zafarte del compromiso.
Yo normalmente acostumbro pedirle a mi equipo de locutores, que para cualquier cosa comprometedora, me culpen a mi.
“Yo soy el malo, … déjenme a mi ser el malo, … dejen que sea yo el que se vea mal, el que niega las cosas, pero no ustedes, … ¡nunca ustedes!”, les digo.
Y así debe ser. Entre las múltiples labores de un Director de Programación (o Director Artístico), es de proteger y escudar a sus locutores. Es la de ayudarlos a conservar esa imagen que tantos esfuerzos cuesta obtener.
Si debido a las relaciones públicas de un locutor, este o esta se ve comprometido(a) cuando le solicitan “un tiempecito al aire” para promover tal o cual cosa, él o la locutora debe de inmediato apoyarse en su Director y aventarle el compromiso.
“Mira, para poder mencionar esto que me pides, tiene que pasar por el Director de Programación. Te voy a dar la dirección de su correo electrónico y así lo tratas directamente con él (o ella)”.
Si esta persona niega la petición, quien se ve mal es precisamente esa persona no el locutor.
“¿No quiso?, … ¡ay que pena!, … pero yo no puedo hacer nada si no lo autoriza él”.
¿El locutor?, en este caso se vio bien. Intento ayudar y estaba dispuesto a complacer la solicitud, pero no estaba en sus manos solucionar el caso.
¿El Jefe?, en este caso se vio como un desgraciado infeliz. ¿Qué le costaba? ¡Ni que la radio fuera de él! ¡Ojala se pudra en un desierto! ( … comentarios similares a menudo van en contra de los Directores de Programación, pero ¡hey!, ¿queríamos estar en radio, ¿no?).
Otro aspecto muy común es cuando gentes del medio o incluso, clientes que se anuncian en la estación, consienten con exceso a un locutor.
La razón es que la mayoría piensa que como es quien esta al aire, pues fácilmente puede pasarles un comercial gratis al aire, una mención simplemente o hacerse “su amigo” y extender así su red de relaciones.
Tampoco falta quien de la nada, sin motivo, razón aparente y en muchas ocasiones, sin avisar, te lleva comida.
Siempre hay radioescuchas “considerados” con sus locutores favoritos.
“¡Que bueno es el ser locutor!”, piensa uno de inmediato.
Pues, … ¡ten mucho cuidado!, una pizza, unas papitas, un refresco, gaseosa o soda, una invitación a comer, una cubeta llena de cervezas en un club nocturno, una fastuosa cena en un restaurant de prestigio, son suficiente para COMPROMETERTE y esos tratos, esas invitaciones y ese consentimiento, tarde o temprano buscarán su compensación.
Entonces, mi consejo es para comenzar, no aceptar nada de esto. Si no aceptas nada, no te comprometes a nada. Fin de la historia.
Si te insisten mucho, busca la forma de dejar claro que aceptaste porque te insistieron, no porque quisiste.
Segundo, si por alguna razón te ves envuelto(a) en el compromiso, DE INMEDIATO ENCAMINA LA SITUACIÓN con tu Director de Programación o con Productor y di que esa persona es quien controla tal o cual cosa o es quien evita el que la hagas.
Pero tienes que salirte del compromiso y volver a tu pedestal de ser la persona amable, positiva y buena.
Y para ti Productor, Director o Jefe de locutores, por si no lo sabías, una de tus funciones en caso de enfrentar algo así, es ser el ‘malo de la historia’. Ser el escudo que protege al locutor y lo saca de la situación comprometedora.
Aunque en este caso, seas tu el que se eche enemigos eternos.
16.2.09
Radio Tip # 41 (Promoción en Cruce/Cross Promotion)
En Estados Unidos se le llama “Cross Promotion” y es simplemente aprovechar la oportunidad de promover lo más fuerte que tiene una estación de radio.
Usualmente es el programa de la mañana, pero también se hace promoviendo otro programa, un evento, algo en fin de semana, etc.
¿Qué exactamente se pretende lograr con la “Promoción en Cruce”?
Publicidad. Publicidad gratis.
Y se debe instituir en tu estación.
Pero como te decía, usualmente el o la locutora del mediodía debería hacer mención de lo relevante, importante o sobresaliente que hizo o piensa hacer el programa de la mañana.
Por ejemplo, “Esta mañana los chicos de (nombre del programa), tuvieron la ocurrencia de pegarle una calcomanía de la estación nada mas ni nada menos … ¡que en la espalda del abogado de OJ Simpson! … ¡en plena Corte! … observa las escenas y escucha el audio en nuestra página en Internet, triple doble u (nombre de la página) punto com. Esta y más ocurrencias las puedes escuchar de lunes a viernes desde la 5 de la mañana con los muchachos de (nombre del programa)”.
Esto si se quiere resaltar algo que ya pasó, algo que ya sucedió, como por ejemplo, una entrevista muy difícil de lograr con alguien famoso, pero si se desea promover algo que va a ser a futuro, bien podría ser algo como:
“ … y te invito a que no te pierdas (nombre del programa), ya que mañana regalarán otro Nintendo Wii en el sensacional concurso de imitadores. También tendrán la entrevista en exclusiva en Español con la primera dama de los Estados Unidos, Laura Bush, que nos contará qué música le gustaba de niña. Todo esto y más desde las 5 de la mañana en (nombre del programa)”.
Y no solo el turno del mediodía debe hacer esto. El de la tarde, el de la noche y hasta los de los fines de semana.
Entre más publicidad tenga lo más fuerte de tu estación, mejores resultados y más audiencia tendrá.
La ventaja es que es publicidad gratis.
Si tienes por decir algo, un nuevo show de música mezclada los sábados, comienza la “Cross Promotion” desde el jueves. Incluso los elementos del show de la mañana lo deben promover. Unos a otros deben ayudarse en una estación. Una mención rápida, resaltando uno o dos puntos fuertes del contenido del programa, es de mucha ayuda.
No sirve de mucho promocionar un programa del sábado con tanta anticipación. Preferible utilizar esos segundos en promocionar algo INMEDIATO. Recuerda, al radioescucha no lo hagas esperar. Dale la recompensa lo más pronto posible.
Ahora, procura hacer intercambios con periódicos, con cines, con la televisión. Esto se logra a través del representante de Relaciones Públicas de la estación o del Director o Gerente de Promociones. Se puede acordar darle publicidad por decir, a las películas y servicios que ofrece una sala de cine, a cambio de que en los ‘cortos’ previos a la película, pasen un comercial o simplemente una foto del logotipo de la estación.
Como siempre, la ocurrencia de ideas es ilimitada.
Donde sepas que va a haber congregación multitudinaria en tu mercado, ahí debes ver la forma de hacerte presente.
Es un beneficio mutuo y haces algo que seguramente tu competencia, no hace.
Usualmente es el programa de la mañana, pero también se hace promoviendo otro programa, un evento, algo en fin de semana, etc.
¿Qué exactamente se pretende lograr con la “Promoción en Cruce”?
Publicidad. Publicidad gratis.
Y se debe instituir en tu estación.
Pero como te decía, usualmente el o la locutora del mediodía debería hacer mención de lo relevante, importante o sobresaliente que hizo o piensa hacer el programa de la mañana.
Por ejemplo, “Esta mañana los chicos de (nombre del programa), tuvieron la ocurrencia de pegarle una calcomanía de la estación nada mas ni nada menos … ¡que en la espalda del abogado de OJ Simpson! … ¡en plena Corte! … observa las escenas y escucha el audio en nuestra página en Internet, triple doble u (nombre de la página) punto com. Esta y más ocurrencias las puedes escuchar de lunes a viernes desde la 5 de la mañana con los muchachos de (nombre del programa)”.
Esto si se quiere resaltar algo que ya pasó, algo que ya sucedió, como por ejemplo, una entrevista muy difícil de lograr con alguien famoso, pero si se desea promover algo que va a ser a futuro, bien podría ser algo como:
“ … y te invito a que no te pierdas (nombre del programa), ya que mañana regalarán otro Nintendo Wii en el sensacional concurso de imitadores. También tendrán la entrevista en exclusiva en Español con la primera dama de los Estados Unidos, Laura Bush, que nos contará qué música le gustaba de niña. Todo esto y más desde las 5 de la mañana en (nombre del programa)”.
Y no solo el turno del mediodía debe hacer esto. El de la tarde, el de la noche y hasta los de los fines de semana.
Entre más publicidad tenga lo más fuerte de tu estación, mejores resultados y más audiencia tendrá.
La ventaja es que es publicidad gratis.
Si tienes por decir algo, un nuevo show de música mezclada los sábados, comienza la “Cross Promotion” desde el jueves. Incluso los elementos del show de la mañana lo deben promover. Unos a otros deben ayudarse en una estación. Una mención rápida, resaltando uno o dos puntos fuertes del contenido del programa, es de mucha ayuda.
No sirve de mucho promocionar un programa del sábado con tanta anticipación. Preferible utilizar esos segundos en promocionar algo INMEDIATO. Recuerda, al radioescucha no lo hagas esperar. Dale la recompensa lo más pronto posible.
Ahora, procura hacer intercambios con periódicos, con cines, con la televisión. Esto se logra a través del representante de Relaciones Públicas de la estación o del Director o Gerente de Promociones. Se puede acordar darle publicidad por decir, a las películas y servicios que ofrece una sala de cine, a cambio de que en los ‘cortos’ previos a la película, pasen un comercial o simplemente una foto del logotipo de la estación.
Como siempre, la ocurrencia de ideas es ilimitada.
Donde sepas que va a haber congregación multitudinaria en tu mercado, ahí debes ver la forma de hacerte presente.
Es un beneficio mutuo y haces algo que seguramente tu competencia, no hace.
12.2.09
Radio Tip # 40 (Ejemplos de mala producción de imagen para una estación)
¿Cuántas veces hemos oído los “testimonios” que sirven para promover una estación de radio, que la ponen como lo mejor, “la estación perfecta”, “la número uno”?
Lamento decirte que es una pena que esas estaciones digan tanta mentira al aire.
Y no dudo que la tuya esté entre ellas.
Pero es natural, ¿quién va a querer promover una estación con bajos calificativos?
Nadie. Pero eso no es pretexto para venir y estructurar una imagen, con mentiras.
Estas estaciones utilizan textos que reflejan el querer vender sus aspiraciones. En otras palabras, promueven lo que QUISIERAN que sus radioescuchas dijeran de ellos, pero en realidad, una estación de radio que utiliza este tipo de promoción, LE MIENTE A SU AUDIENCIA, porque según esto, sus radioescuchas opinan algo parecido a lo siguiente:
“¡La estación perfecta para (_ciudad_)!”
“La siento como MI ESTACIÓN!”.
"¿Quién necesita un iPod?, … ¡aquí encuentro todo!" (¡Si, como no!, como si la gente, cuando la estación cambió de formato, llenara el basurero municipal de iPods porque ya no los van a usar). "¡Me encantan las canciones!, … ¡las conozco todas! (alguien quizá pueda decir la primera parte, pero no la segunda).
“La estación me da energía” (¿¿??)
“Cada canción me hace sentir bien” (¿Cada canción?, pues ¿que la estación no toca de hecho NI UNA SOLA CANCIÓN QUE TE GUSTE?).
“La estación que se ajusta a mi estilo de vida” (¿Qué diablos quieren decir con eso?, … ¿Qué la estación es explotada, mal pagada, bajo stress diario, que se levanta a las 6 de la mañana preocupada por cómo pagar la renta y que no hace ejercicio ni le alcanza el día para nada?).
Testimonios falsos como estos, hacen sonar las alarmas.
Y todavía hay quienes se atreven estrenar una estación y a los 15 minutos ya escuchamos gente “en la calle” muriéndose por el nuevo formato.
¡Por favor!
A quien se le ocurren estas ideas, piensa que los comentarios se regresarán al auditorio cargados de los atributos positivos que la audiencia ve en la estación, pero no se dan cuenta de que lo que en verdad reflejan, es lo que la estación DESEARÍA que sus radioescuchas digan.
“La número uno en ……..”, … “Los éxitos más …….”.
A mi se me dijo cuando llegué a Los Angeles, que la gente le gusta asociarse con el número uno, por eso se debería utilizar esto en la promoción de la estación.
La estación difícilmente llegaba al número 22, ¿por qué decir que era la ‘número 1’?
Para colmo, me envían a un excelente curso de Programadores donde me enseñan que ese tipo de imagen denota arrogancia y superioridad (y mientras mis jefes me enseñaron una cosa y en el seminario me dijeron otra, pues prácticamente a mi me dejaron totalmente confundido).
“Nunca se debe hacer sentir menos al radioescucha, … no es bueno hacerles sentir que uno esta arriba y ellos abajo, que nos deban ver como superiores a ellos”, fue lo que se me quedó grabado de esa sesión y se nos instruyó a que al hacerlo, vigilemos el hacerlo AL MISMO NIVEL QUE EL RADIOESCUCHA.
Utilizar por ejemplo la palabra ENTENDIMIENTO, “La estación que te entiende”, es un buen ejemplo. Lo difícil viene al agregar el por qué entiende a su auditorio.
Esto solo tu sabes explicar; solo tu sabes EN QUÉ tu estación entiende a tu auditorio.
Se comentó ese conocido método de utilizar voces de esas que se imponen, que masacran a la competencia.
“Cierto”, se nos dijo, “hay estaciones que con tal de sentirse superiores a su competencia, utilizan voces y efectos con la intención de apabullarlos. Son spots diseñados para acabar a la competencia. Lamentablemente olvidan su principal objetivo, que es el radioescucha y sin saberlo, van y lo apabullan también”.
Terminaron diciendo que esos promos reflejaban arrogancia en lugar de empatía.
Por lo tanto, quiero sugerirte que cuando diseñes tus liners, slogans o promocionales, utiliza voces reales, comentarios que de verdad dice la gente. La naturalidad nunca los va a engañar, .. es más, la identifican de inmediato porque se compaginan con ella.
Las risas, turbaciones, gesticulaciones, todo eso es natural porque TODOS SOMOS ASI EN LA REALIDAD.
Úsalas, llévalas al aire, haz que tu mismo auditorio te promueva con testimonios verdaderos, no prefabricados.
Y háblales al mismo nivel.
Para ejemplificar esto último, nos pusieron un promo que una estación utilizó al tope de cada hora.
Resulta que un tornado había arrasado la ciudad donde estaba localizada la estación y la gente la sintonizaba para estar al día en los acontecimientos. Tres días después, comenzaron a correr los promocionales, que decían más o menos así:
“KZRA sabe la pena que envuelve a todos los que vivimos en (ciudad). Sabemos que muchos han perdido sus casas, sus autos, sus animales, … lo peor de todo, es el saber que varias familias han perdido a sus seres queridos. Sin embargo, el dolor no solo para aquí, ya que nosotros también hemos sufrido las consecuencias del tornado. Nuestras antenas fueron derribadas, las oficinas de KZRA también sufrieron daños, así como las casas y automóviles del personal que labora aquí. Queremos que todos nos acompañemos y nos levantemos de estos momentos tan difíciles, porque así como a ti, tu estación KZRA, también sufre en estos momentos”.
La respuesta del público fue abrumadora. ¿La razón?, sintieron que la emisora era uno de ellos. Sintieron su fragilidad y su dolor ante las consecuencias.
Aunque el ejemplo es extremadamente caótico, te da una idea del fuerte impacto que ocasiona el hacer sentir a tu auditorio como uno de ellos.
Usa tu imaginación, usa tu creatividad, para que hasta en esto, apliques tu talento y promuevas eficientemente tu estación.
Lamento decirte que es una pena que esas estaciones digan tanta mentira al aire.
Y no dudo que la tuya esté entre ellas.
Pero es natural, ¿quién va a querer promover una estación con bajos calificativos?
Nadie. Pero eso no es pretexto para venir y estructurar una imagen, con mentiras.
Estas estaciones utilizan textos que reflejan el querer vender sus aspiraciones. En otras palabras, promueven lo que QUISIERAN que sus radioescuchas dijeran de ellos, pero en realidad, una estación de radio que utiliza este tipo de promoción, LE MIENTE A SU AUDIENCIA, porque según esto, sus radioescuchas opinan algo parecido a lo siguiente:
“¡La estación perfecta para (_ciudad_)!”
“La siento como MI ESTACIÓN!”.
"¿Quién necesita un iPod?, … ¡aquí encuentro todo!" (¡Si, como no!, como si la gente, cuando la estación cambió de formato, llenara el basurero municipal de iPods porque ya no los van a usar). "¡Me encantan las canciones!, … ¡las conozco todas! (alguien quizá pueda decir la primera parte, pero no la segunda).
“La estación me da energía” (¿¿??)
“Cada canción me hace sentir bien” (¿Cada canción?, pues ¿que la estación no toca de hecho NI UNA SOLA CANCIÓN QUE TE GUSTE?).
“La estación que se ajusta a mi estilo de vida” (¿Qué diablos quieren decir con eso?, … ¿Qué la estación es explotada, mal pagada, bajo stress diario, que se levanta a las 6 de la mañana preocupada por cómo pagar la renta y que no hace ejercicio ni le alcanza el día para nada?).
Testimonios falsos como estos, hacen sonar las alarmas.
Y todavía hay quienes se atreven estrenar una estación y a los 15 minutos ya escuchamos gente “en la calle” muriéndose por el nuevo formato.
¡Por favor!
A quien se le ocurren estas ideas, piensa que los comentarios se regresarán al auditorio cargados de los atributos positivos que la audiencia ve en la estación, pero no se dan cuenta de que lo que en verdad reflejan, es lo que la estación DESEARÍA que sus radioescuchas digan.
“La número uno en ……..”, … “Los éxitos más …….”.
A mi se me dijo cuando llegué a Los Angeles, que la gente le gusta asociarse con el número uno, por eso se debería utilizar esto en la promoción de la estación.
La estación difícilmente llegaba al número 22, ¿por qué decir que era la ‘número 1’?
Para colmo, me envían a un excelente curso de Programadores donde me enseñan que ese tipo de imagen denota arrogancia y superioridad (y mientras mis jefes me enseñaron una cosa y en el seminario me dijeron otra, pues prácticamente a mi me dejaron totalmente confundido).
“Nunca se debe hacer sentir menos al radioescucha, … no es bueno hacerles sentir que uno esta arriba y ellos abajo, que nos deban ver como superiores a ellos”, fue lo que se me quedó grabado de esa sesión y se nos instruyó a que al hacerlo, vigilemos el hacerlo AL MISMO NIVEL QUE EL RADIOESCUCHA.
Utilizar por ejemplo la palabra ENTENDIMIENTO, “La estación que te entiende”, es un buen ejemplo. Lo difícil viene al agregar el por qué entiende a su auditorio.
Esto solo tu sabes explicar; solo tu sabes EN QUÉ tu estación entiende a tu auditorio.
Se comentó ese conocido método de utilizar voces de esas que se imponen, que masacran a la competencia.
“Cierto”, se nos dijo, “hay estaciones que con tal de sentirse superiores a su competencia, utilizan voces y efectos con la intención de apabullarlos. Son spots diseñados para acabar a la competencia. Lamentablemente olvidan su principal objetivo, que es el radioescucha y sin saberlo, van y lo apabullan también”.
Terminaron diciendo que esos promos reflejaban arrogancia en lugar de empatía.
Por lo tanto, quiero sugerirte que cuando diseñes tus liners, slogans o promocionales, utiliza voces reales, comentarios que de verdad dice la gente. La naturalidad nunca los va a engañar, .. es más, la identifican de inmediato porque se compaginan con ella.
Las risas, turbaciones, gesticulaciones, todo eso es natural porque TODOS SOMOS ASI EN LA REALIDAD.
Úsalas, llévalas al aire, haz que tu mismo auditorio te promueva con testimonios verdaderos, no prefabricados.
Y háblales al mismo nivel.
Para ejemplificar esto último, nos pusieron un promo que una estación utilizó al tope de cada hora.
Resulta que un tornado había arrasado la ciudad donde estaba localizada la estación y la gente la sintonizaba para estar al día en los acontecimientos. Tres días después, comenzaron a correr los promocionales, que decían más o menos así:
“KZRA sabe la pena que envuelve a todos los que vivimos en (ciudad). Sabemos que muchos han perdido sus casas, sus autos, sus animales, … lo peor de todo, es el saber que varias familias han perdido a sus seres queridos. Sin embargo, el dolor no solo para aquí, ya que nosotros también hemos sufrido las consecuencias del tornado. Nuestras antenas fueron derribadas, las oficinas de KZRA también sufrieron daños, así como las casas y automóviles del personal que labora aquí. Queremos que todos nos acompañemos y nos levantemos de estos momentos tan difíciles, porque así como a ti, tu estación KZRA, también sufre en estos momentos”.
La respuesta del público fue abrumadora. ¿La razón?, sintieron que la emisora era uno de ellos. Sintieron su fragilidad y su dolor ante las consecuencias.
Aunque el ejemplo es extremadamente caótico, te da una idea del fuerte impacto que ocasiona el hacer sentir a tu auditorio como uno de ellos.
Usa tu imaginación, usa tu creatividad, para que hasta en esto, apliques tu talento y promuevas eficientemente tu estación.
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